— No tardaré mucho.
Fueron las palabras que mencionó el conductor del auto al salir. El sonido de la lluvia estaba llenando sus oídos. El auto se estacionó en una zona techada. Un empleado se acercó apresuradamente y extendió un paraguas para evitar que cualquier filtración de agua manchara su pulcro traje.
— Lo estábamos esperando, señor.
— ...
El extenso salón que se vislumbra estaba completamente vacío, con solo un par de empleados para atender a los invitados VIP.
— Señor Han por aquí, por favor.
Han Seo tenía las manos en sus bolsillos, siguió al empleado por un elegante pasillo mientras sacaba un cigarrillo y lo encendía.
Estaba demasiado tranquilo para ser un evento especial.
El empleado abrió la puerta del salón y un auditorio muy grande se extendió ante sus ojos.
— ¿No hay más invitados?
— No señor, este es un concierto especial para el Director General, su asiento está en la primera fila, es el número 15, pase por favor.
— ...
‘Interesante’.
No había intención de ocultarlo, pero el ambiente era extraño.
Cuando caminó por el silencioso pasillo hasta el asiento una luz se encendió y el telón se levantó.
Sus ojos giraron en dirección al sonido que comenzó a filtrarse. La melodía armónica del sonido del violín era suave, pero profunda, sin duda no era una sobreestimación llamarlo un maestro del violín.
El traje blanco brillaba bajo la luz del escenario. Su rostro mantenía una expresión serena y concentrada. Todo el escenario fue absorbido por su perfecto acto. Gobernantemente, su mano con dedos finos y largos movieron suavemente el arco del instrumento. Un aura brillante se extendió sobre él.
— ...
El cuerpo que estaba bajo el resplandor de las luces del escenario interpretó dos melodías. No hubo ningún error en su interpretación, fue una ejecución perfecta.
La persona que consideraba como un pequeño hermano, un chico con gracia y carisma… No era más que la piel que ocultaba a un insecto que se arrastraba dejando un hedor pestilente a su paso.
Pensó que su carisma podría influenciar positivamente en Jinwoo que se mostraba cauteloso en sus primeros días de matrimonio.
Fue estúpido no darse cuenta de su error.
Fueron sus propias palabras las que llevaron al oponente dentro de su casa, destruyó la dignidad de su cónyuge y fue como haber asumido su condición de amante.
Mientras sus ojos quedaban al azar sobre el cuerpo de su oponente, el calor comenzó a concentrarse en sus manos, el sudor se acumuló. La sensación de calor era como si un volcán estuviera a punto de explotar.
El gran peso de su conciencia era asfixiante. Su boca se secó en sobremanera, fue como si estuviera tirado en un desierto, muriendo de sed.
La sensación aplastante que cayó sobre él sin piedad carcomió su corazón dolorosamente.
Si tan solo pudiera regresar…
Haría las cosas adecuadamente…
[Tuduc.]
El sonido se detuvo.
— Han Seo… Viniste.
Su rostro se contorsionó cuando sintió la feromona Omega.
A diferencia de la feromona Omega de Jinwoo que era suave y fragante, esa feromona era aromática y muy dulce. Fue como una rosa sharon, pero no era una feromona que pudiera pasar desapercibida para un Alfa dominante, cuyos sentidos están agudizados.
Había un rastro que estropeaba ese olor. Fue la sensación de que la feromona había sido provocada por un estimulador sintético.
—¿Por qué me llamaste?
Tae Jun bajó el violín y miró a su oponente.
— Deseaba verte.
Fueron unas palabras que no se escuchaban sinceras. Estaba claro que sus acciones fueron las de un imbécil las cuales no podría perdonar. Pero lo que más le molestaba era la actitud de Tae Jun, quien vivía en una fantasía producto de su imaginación. En su cabeza, ellos deberían estar casados por una promesa de su infancia.
Miró su rostro, un rostro suave, con ojos brillantes, pero algo estaba mal. Desafortunadamente, conoció al verdadero personaje detrás de escena, un personaje de un drama barato que se aferraba a él.
— Lo siento… Yo… Amo a Han Seo.
Tae Jun se arrodilló a sus pies, rogando su perdón.
El cuerpo esbelto temblaba mientras gruesas lágrimas caían desde su rostro. Instintivamente, Han Seo se molestó. Reprendio sus deseos de sostener ese delgado cuello y estrangularlo.
— No tengo intención de repetir mis palabras. Escucha bien lo que voy a decirte, aléjate de él, sé lo que has hecho, todo lo que has intentado contra Jinwoo. Entonces, toma esta visita como una muestra de mi favor.
— Si…
Tae Jun no respondió de inmediato y se quedó arrodillado mirando al piso. Incluso si estaba preparando una obra de teatro barata su actitud era extraña. Si va a retroceder de esa manera… No había vuelta atrás.
— Aún así… Quiero preguntar, ¿por qué él y no yo? ¿Por qué lo escogiste a él?
Fue la pregunta decisiva. Si estaba ahí para detenerlo, si pensaba llevar a cabo su venganza, ya fuera porque estaba dolido, molestó o porqué simplemente era un capricho… Estaba dispuesto a romper cualquier límite.
— Su feromona es buena, es tan buena que me hace ver las estrellas aún con los ojos cerrados, la temperatura de su cuerpo es tan cálida que me hace sentir flotar en las nubes, su sonrisa es tan hermosa que solo tengo ojos para él… ¿Podrías competir con eso?
— ...
Entonces Tae Jun jun sintió una amarga sensación golpeando su pecho. Sin intenciones de retirarse, analizó cuidadosamente esas palabras.
— ¿Competir? ¿Quieres que compita contra ese Omega? ¿Aún tengo oportunidad?
— Dímelo tú.
El rostro se iluminó, ¿qué estaba pasando? ¿Cuál era la forma de pensar de Han Seo? El corazón de Tae Jun comenzó a latir como si estuviera corriendo un maratón, Tae Jun abrió la boca.
— Haré lo que sea, probaré que soy digno de Han Seo.
— Arregla el problema con tu feromona. Detesto el olor agrio que se mezcla. No porque esté aquí significa que tienes alguna oportunidad. Jinwoo tiene mis manos, mis ojos, mis piernas, todo es de él ahora.
Tae Jun frunció el ceño, era un secreto que realmente no pensó en decir al mundo. Porque toda su vida se guardó para Han Seo. Tras años de usar medicamentos para hacer que su feromona fuera más intensa e irresistible para los Alfas, su cuerpo comenzó a generar una adicción. Pese a su gran talento y hermosa apariencia, su feromona era la única que Tae Jun no era capaz de arreglar.
No importaba su grandes cualidades o todo el amor del público que recibiera, esa sed nunca se detenía.
Gracias al dinero y prestigio de su familia, que era reconocida en el medio artístico en todo el mundo, Tae Jun tuvo acceso a todo lo que ese mundo podía ofrecerle, los temas triviales y vulgares no le interesaban.
Vivió con la idea de convertirse en la estrella más brillante del cielo para Han Seo y que cuando estuviera de pie, a su lado, pudiera brillar de la misma forma de su Alfa.
— Siempre te he tenido en mi corazón Han Seo, pero el señor Jinwoo… No puede haber dos personas en su corazón… Supongo que este es el acto final.
— ... Si, es el acto final.
Después de un rato, Tae Jun aceptó las palabras de Han Seo, tenía el acceso a las mejores drogas para su condición, si era una feromona dulce lo que Han Seo quería, eso tendría.
— Asegúrate que la droga le sea entregada en el tiempo correcto, no debe de haber errores…
[Sí, señor.]
Han Seo colgó el teléfono celular.
Sus recuerdos, ahora nebulosos y distantes parecían darle una sensación de urgencia que era extraña. Aunque el mismo Han Seo era una persona así, su amabilidad y todo lo bueno que pudiera ofrecer le pertenecía a Jinwoo.
Había intentado ocultar su verdadera naturaleza todo este tiempo. Así, pensó que se sentiría menos sucio al estar con un ser tan hermoso como Jinwoo. ‘¿Si supieras lo que estoy a punto de hacer, si conocieras los terribles pensamientos que albergó…? ¿Me perdonarías?’
Estaban atrapados en un vórtice, el dolor y las experiencias del pasado estaban regresando a sus vidas… Fue su codicia lo que terminó destruyendo esa hermosa existencia llamada Jinwoo.
Sus sentimientos de miedo y cobardía lo paralizaron. En ese momento, esta vida tenía el propósito de enmendar sus errores. Si él tenía que morir para que Jinwoo fuera feliz, Han Seo podría lanzarse desde la torre del Grupo Han con una sonrisa en su rostro de haber hecho feliz a Jinwoo.
Había una pequeña curva en los labios de Han Seo mientras veía un Seúl brillar bajo la noche. Sus ojos reflejaban la hermosa sonrisa de Jinwoo acompañada con el dulce rubor de sus mejillas. No podía parar de pensar en él, sus sentimientos estaban en el suelo. Mirando atrás, más desagradable se volvía ese pesado dolor en su corazón. Ahora estaban divorciados, un Alfa y un Omega que tenían sentimientos en común, pero que esos sentimientos eran cubiertos por unas profundas heridas.
‘Heridas que yo le cause’.
Han Seo miró al cielo, estaba particularmente oscuro.
‘Estoy tan avergonzado de pedirte esto… No soy lo suficientemente bueno ni siquiera para mirarte brillar en el cielo. Pero soy codicioso y tengo que hacerte esta petición, cuida a papá, protégelo desde el cielo y… No me odies, porque desde el momento que supe de ti, mi corazón se alegró. Por favor… No rechaces mi pedido sincero y si alguna vez somos dignos… Regresa, regresa a nosotros e iluminanos con tu luz, pequeño’.
Han Seo bajó la mirada y vio sus manos. Sentimientos intensos comenzaron a fluir dolorosamente. ¿Qué sentido tiene mirar al pasado cuando todo fue destruido por esas manos?
Un momento de silencio envolvió el automóvil en el que viajaba, solo en el abismo de ese sepulcral silencio, Han Seo pensó:
‘Si este cuerpo se destruye, si este cuerpo no soporta tu ausencia… Me iré y si el cielo se vuelve misericordioso podré conocerlo y le hablaré de ti. De lo hermoso que eres y del gran amor con el que siempre lo recuerdas’.
En ese momento, sin previo aviso, sintió como algo revoloteaba en su pecho.
Pensó que esos sentimientos que eran como asfalto habían sido derretidos por una cálida sensación. Han Seo tocó su pecho y sonrió.
Una persona tan lamentable que no valoró lo verdaderamente valioso en su vida anterior. Aún así, estaba listo para ser quien en verdad era, al final, cuando fuera el final… Podría arrodillarse en el suelo y suplicar por el perdón de Jinwoo y de su bebé.
Han Seo se convirtió en una persona que le dio la bienvenida a la muerte, la abrazó y después volvió a abrir sus ojos en el pasado. Su mente solo tenía un solo recuerdo, Jinwoo, una persona que sufrió mucho e incluso murió envuelto en un terrible dolor.
Su mano se deslizó por el bolsillo interior de su chaqueta y sostuvo su teléfono celular. Un nombre inusual apareció en su libreta de direcciónes.
[¿Director Han? Esto es una sorpresa.]
— Presidente Park Sa-yeong, ha pasado un tiempo.
[Realmente si, es bueno escucharlo.]
— Hay un favor que quiero pedirle.
[Vaya, esto es extraño. ¿Está pidiendo un favor? Haré lo que esté en mis manos para hacerlo.]
— Hoy, estuve en una presentación realmente talentosa de un violinista, es un talento que vale la pena no perder de vista, usted me entiende.
[De acuerdo, investigaré y mañana me encargaré de eso, no es un trabajo complicado.]
— Presidente Park, siempre ha sido un importante socio del Grupo. No olvidaré este favor.
Fue una sorpresa cuando Tae Jun se despertó y miró su perfil de redes personal. Era tendencia nacional. En todos lados literalmente, no había un lugar donde no estuviera siendo mencionado.
Mantuvo su boca cerrada por un momento. Fue porque su corazón latía con mucha fuerza y sus ojos revoloteaban de emoción. ¿Era una manera de demostrar que había conseguido su favor? No había una celebridad Omega más importante que él ahora.
Después de ducharse y acostarse en la cama, miró el televisor. Había un reportaje especial de él programado para la sección cultural de un noticiero importante. ¿Realmente era tan sencillo? Todo los medios se volvieron locos por una foto filtrada a un noticiero de chismes donde Han Seo estaba mirando la interpretación. ¿Cuando fue tomada esa fotografía?
[¿Una presentación privada para el Director General del Grupo Han y el exitoso violinista Tae Ju? La primavera brilla de forma hermosa.]
Incluso su manager y personal de su compañía lo bombardearon respecto si deberían o no sacar un boletín de prensa. Tae Jun se negó, el alboroto había puesto todas las atenciones en él, fue como si su corazón estuviera tan emocionado que saldría de su pecho.
***
Han Seo se encogió de hombros levemente ante la mirada de desaprobación de su secretario.
Sujin era una persona que estaba muy fuera de las expectativas de un simple perfil de un secretario y no solo era su mano derecha, era un hombre digno de ser llamado —shadow—. Tras ser perseguido por gobiernos internacionales e incluso INTERPOL, fue difícil persuadirlo para que se aliara con él.
Era una persona leal que siempre se mantenía al margen y nunca daba su opinión personal, salvo en situaciones particulares, muy particulares.
— ¡Está lista la conferencia de prensa! ¡¿Va a dejar que los rumores se extiendan así?! Es una persona que afectará la imagen del Director General! ¿Cómo puede hacer eso?
— ... Secretario, ¿qué te emociona tanto?
— ¿Olvidó cuál era el propósito de todo esto? ¿Por qué mandó esa fotografía?
Sujin era un genio, una mente maestra… Sin embargo, en algunos aspectos, era muy básico.
— ¿Hubo algún comunicado oficial por parte de él?
— No, está demasiado tranquilo incluso en sus redes sociales.
— Muy bien, entonces… Mordió el anzuelo.
— Si, bueno… Tengo un mensaje de la Señora Han…. Dijo que si no se contactaba con ella de inmediato, realmente tendría que pensar en ampliar su seguro de vida.
— ¿Mi madre?
— Estaba realmente furiosa, ¿Por qué me pone contra la espada y la pared? He hecho muchas cosas en mi vida, he sido un empleado leal… ¿Acaso quiere que la Vicepresidenta Han acabe conmigo?
— Hablaré con ella.
— Si, deberá hacer eso.
Han Seo miró su teléfono celular con una expresión tensa en su rostro.
Esto iba a ser complicado de explicar.
— ¿Madre?
[... Tú… Hijo de Han Yoon, ¡¿A qué estás jugando?! ¡Trae tu trasero en este instante y da la cara! Y no pienses llamar a tu padre, me encargué de él antes… Tienes tres minutos para llegar aquí o de verdad haré que te quedes en la calle.]
— De acuerdo.
— Ahh…
Una persona que realmente puede actuar así. ¿No era un poco similar a la personalidad de Jinwoo? Ha, entiendo porque se llevan tan bien ese par.
Han Seo llegó a la oficina de la vicepresidenta.
Un aura feroz lo recibió en el momento que puso el primer pie dentro de la oficina. Incluso su padre, el presidente Han estaba allí.
Ambos estaban sentados en la sala de estar de la oficina de la vicepresidenta, sin embargo, realmente había ocurrido algo.
Su padre se encontraba sentado frente a su madre, sus piernas estaban rectas y las palmas de sus manos descansaban sobre sus muslos, incluso la espalda recta estaba un poco curva, acompañando la cabeza que se inclinaba sutilmente.
‘Padre fue reprendido’. Era impresionante ver como una persona así pudiera tener esa expresión, si no hubiera estado frente a él varias ocasiones, no podía haberlo creído.
— Siéntate.
Han Seo avanzó y se sentó a un lado de su padre. [¡Bang!] Un ligero golpe llegó de su costado. Era su padre, que golpeó suavemente en advertencia, susurrando que bajara su cabeza.
— ¿Cómo pudieron ocultarlo? Ustedes… Son iguales.
— Madre.
— Guarda silencio… Entiendo a tu padre. Pero ¿cómo es posible que seas tan estúpido? ¿Jugando con el Omega que lastimó a tu cónyuge? Dios mio, pobre Jinwoo. ¿Con qué cara lo veremos ahora? Ya lo sé, voy a expulsarte de la familia, después le diré a Jinwoo que regrese y acepte el registro familiar.
— ¿Qué?
— ¿Qué?
— Si crees que esto es una broma… Ponme a prueba. Si no eres capaz de poner las cosas en orden… Mamá tendrá que intervenir y solo te diré que mis métodos son diferentes a los de papá.
— ¿Cariño? ¿No es algo demasiado excesivo?
— ...
— Tienes un avión privado esperando por ti, hay personal de seguridad que te arrastrará hasta allí y tienen órdenes de atarte si es necesario… Estarás expulsado de Corea hasta que regreses con él. Tu padre manejará el asunto del Omega… ¿Lo has entendido?
Eran unas palabras firmes y sin titubeo, pero sus ojos… Se mostraban húmedos y contraídos. Estaba preocupada. Ella era así, a diferencia de su padre que era una persona que actuaba sigilosamente para dar un golpe contundente, madre era feroz y le gustaba una ofensiva decisiva. Dos personas tan diferentes coexistiendo juntos.
— No es que no sepa que hay algo extraño contigo… Pero esto es lo último que haré por ti, no puedo sentarme y ver cómo se destruyen entre ustedes. Tienes tres días para dejar tus pendientes en orden antes de ir a los Estados Unidos.
— ... Madre… Gracias.
***
— ¿Es él?
— Si, no lo pierdas de vista e informa cualquier movimiento
— La tía está particularmente furiosa con el Omega que robó la fortuna familiar y quiere recuperarla.
— Vaya… Eso es molesto, siendo estafados por un Omega. ¿No es él el hijo de nuestro tío, el que murió en prisión?
— Si, hace un tiempo fue abandonado por su Alfa, entonces, la tía lloró mucho cuando recibió los papeles de Corea que debía de ser su guardián.
— Mi tía ha sufrido mucho, los Omegas siempre son así. Entonces, ¿Lo qué me pidió, de aquella clínica? ¿Enviará al Omega allí?
—Si, una vez que recupere el dinero de la familia, enviará al Omega allí para que reciba el tratamiento adecuado, pero ese Omega tiene muchas conexiones, dijo que era un prostituto. Por lo que tenemos que ser discretos.
— Ya veo, me haré cargo de la mujer Beta primero.
— Si, eso es una buena idea.
Dos hombres sentados en el jardín de un café conversaban mientras miraban el humo de dos americanos. Uno de ellos sostenía una foto de Jinwoo, era una fotografía extraña. Parecía haber sido tomada a la distancia y el rostro de Jinwoo no miraba directamente a la lente de la cámara, fue como si no supiera que alguien le hubiera tomado una foto en primer lugar.
La conversación trivial se estaba llevando a cabo en un día soleado característico de Miami. Uno de ellos le extendió un pequeño estuche a su compañero, murmuraron un par de oraciones más y después de un tiempo se retiraron.
***
La ciudad de Miami era bulliciosa y llena de personas. El gran turismo internacional hacía que muchas personas de todo el mundo desfilaran por sus calles, haciendo que la diversidad de culturas fuera algo común de notar.
Entre una población tan grande que va y viene, la desaparición de una persona era algo insignificante y fácil de lograr.
— A mi también me sorprendió mucho… ¿Realmente eres tú? ¡Ah! Tengo mi copia del libro en casa ¿podrías firmarlo en estos días?
— Si…
— ¿No es esto algo asombroso? Soy amiga de un escritor famoso.
— No, no soy famoso….
Jinwoo asintió con una expresión sonrojada. Mike y Emma fueron las primeras personas a las que Jinwoo les confesó su identidad. Las palabras que recibió no estuvieron mal, para su sorpresa ambos lo conocían ¿Qué posibilidad en el mundo existe de encontrarte con personas que han leído tus libros?
— Tengo curiosidad, ¿Por qué lo ocultaste?
— ...
Jinwoo claramente tuvo un pensamiento respecto a ese hecho. La sociedad en Corea era muy conservadora, sin mencionar que sus leyes aún eran muy duras con los Omega. No había forma de que Jinwoo, un Omega, pudiera haber logrado tal cosa.
Oh Minji por su parte, era un escritor que rompió con cualquier clasificación al estar cubierto con un aire de misterio. Hasta este punto había ganado varios premios en los que Do Yeon mostró su rostro y agradeció al público.
El misterio tras el escritor que no estaba interesado en estar bajo la luz de los reflectores fue un tipo de propaganda indirecta que captó la curiosidad de muchas personas alrededor del mundo.
Sus libros eran lo único que le quedaba.
— Corea aún es complicado respecto a lo que pueden hacer las personas con rasgos como el mío… Fue difícil pero no me arrepiento.
Emma tomó un poco de café sorbiendo de la pajilla.
El suave sonido del bullicio del centro comercial era extrañamente agradable. Era la primera vez que Jinwoo se sentaba a conversar con personas así en mucho tiempo.
— Debió ser muy difícil, Jinwoo es una persona admirable.
— ¡Claro que sí! Jinwoo, esta fue una noticia muy sorprendente, realmente leí a Oh Minji por recomendación de Choi Sang, ¿sabías que él es un gran fanatico?
— ¡Basta! ¿Por qué tienes que decir cosas vergonzosas frente a Jinwoo?
Jinwoo abrió los ojos y una carcajada salió involuntariamente de su boca. Después de su salida a la playa, Jinwoo pasaba la mayor parte de su día fuera de la clínica de descanso. Constantemente era arrastrado bajo las excentricidades de Mike.
Choi Sang era como esa figura adulta que se encargaba de buscar una situación intermedia entre ellos. Y Jinwoo se sintió más seguro así. Tembló cuando Mike lo invitó a un lugar donde le colocaron un equipo de protección extraño y lo pusieron frente a una torre gigante con baches donde el objetivo era escalar.
Realmente su semblante se volvió tan blanco como el de un fantasma. Pero Choi Sang llegó corriendo en ese momento a regañar a Mike por eso. En la discusión entre ellos, Jinwoo no pudo dejar de mirar con curiosidad el alto muro que estaba frente a él.
¿Qué podría pasar si lo intentaba al menos una vez? ¿Y si pudiera al menos llegar solo unos cuantos metros arriba? Con ese pensamiento su corazón se infló de forma extraña y sus manos comenzaron a hormiguear deseando escalar aunque fuera un poco.
Pero al final, miró la expresión preocupada en el rostro pálido de Choi Sang y pensó que no era mejor no hacer eso.
— Por favor… Anda, será divertido.
Jinwoo salió de sus pensamientos cuando la voz de Emma resonó en sus oídos. Se quedó quieto tomando un poco de frappe de fresa bajo la mirada de esas tres personas.
— Lo siento, pero ¿que decían será divertido?
— Ir a un concurso de perros calientes, Noah es amante de esas competencias.
— ¿Qué…?
— Hace dos años fue el segundo lugar, comió más de treinta perros calientes, ¡fue muy divertido! Menos la parte donde vomitó y tuvo malestar estomacal por días…
— Bueno, suena genial.
— ¡¿Escuchaste Choi Sang?! Dijo que era una idea genial!
Choi Sang miró a Jinwoo con ojos sorprendidos. Jinwoo miró a Choi Sang que tenía una expresión divertida en su rostro.
— ¿De verdad quieres ir?
— Nunca he visto algo así, realmente tengo curiosidad.
Choi Sang mantuvo la mirada fija en Jinwoo, buscando alguna señal de duda. Su condición realmente había mejorado mucho en estos últimos días. Incluso escuchó del psiquiatra que había habido avances significativos. Aún así… ¿Cómo podría persuadirlo de no estar en lugares así?
La situación estaba contenida hasta cierto punto dado que Jinwoo nunca estaba solo. Pero en un lugar donde un gran número de personas se reúnen… ¿No era pensar de forma excesiva?
Debía tener cuidado.
Un estímulo demasiado agresivo podría detonar nuevamente pensamientos negativos en Jinwoo, quien era como un globo con fluctuaciones de aire en su interior. Estaba haciendo todo lo posible porque estuviera en un entorno adecuado.
Cuando escuchó la idea de Mike de someter a Jinwoo a una terapia distinta que no fuera dentro de una clínica o consultorio realmente reprobó la idea. Se alegró de estar equivocado. Mike realmente fue un elemento positivo pero también tenía que estar atento.
Mike era una clase de persona que amaba lo extremo y dado que consideraba a Jinwoo un amigo más que un paciente, Choi Sang tenía que proteger la condición de Jinwoo sin hacerlo sentir avergonzado.
Por alguna extraña razón su corazón estaba enviando una alerta, como si sintiera que algo estaba mal y que Jinwoo no debería ir a ese lugar. Choi Sang miró a Mike y le hizo una sutil seña.
— ¡Honey! ¿Finalmente vas a confesar tu amor?
— Ah… Claro que no. Es Jinwoo, no quiero que lo lleves allí, es muy peligroso para él.
— ¿De qué estás hablando?
— ¿Es parte de la terapia o es una invitación entre amigos? Si no va a ayudarle entonces dile que el plan se canceló o que Noah enfermó del estómago.
— Honey, quiero preguntarte algo, ¿alguna vez Jinwoo te ha dicho lo que le gusta? ¿Te ha dicho lo que quiere o lo que no quiere…? Podemos cambiar los planes, pero debes dejar de verlo de esa manera.
— ¿De qué estás hablando?
— Los Omegas estamos acostumbrados a eso, todos lo hacen… Es tan normal que a nadie le importa, todos pasan sobre lo que deseamos. ¿Viste su expresión? ¿Vas a poner tu voluntad sobre la suya? Honey, te amo, pero tienes que mantener el enfoque.
— ¿Qué?
— Que te amo, no es posible que finjas ser ignorante.
— Eso no, ¿crees que yo podría hacer eso?
— Solo sé que tú… No puedes ser objetivo, entonces, deja esa parte en mi lado de la cancha.
Se sintió miserable, fue porque esas palabras eran ciertas. Sin forcejear, Choi Sang admitió su error. Jinwoo debía de tener su propia libertad, estando detrás de él cuidando siempre sus pasos no era una manera correcta de ayudarle.
Fue un largo día.
Después de tomar un refrigerio en la cafetería de un centro comercial fueron a ver una escena que sería grabada por los actores. El Set a donde fueron realmente había captado la idea que Jinwoo quería plasmar en su libro.
Un callejón, uno donde la salida no es perceptible y el sonido hace eco de forma aterradora. Se adaptó escenografía especial para hacerlo ver terriblemente deteriorado e incluso había una máquina de humo.
— Escena 187, ¡Acción!
Jinwoo permaneció junto a Choi Sang en silencio mientras las imágenes que creó en su mente estaban siendo reflejadas por los dos actores masculinos. Sus ojos miraron atentamente la actuación.
Esa escena en particular era la más importante.
Donde el detective da su vida por salvar al hombre que ama. El hombre que mató a su amante y le robó su vida. Era un final donde la palabra ‘nosotros’ no existía.
El tono de voz, los ojos, los movimientos de los actores, todo era tan real… Jinwoo dio unos pasos hacia atrás cuando llegaron al clímax.
La imagen de Jay, el detective, siendo sujetado por Nowak, el gangster. Jay besando por última vez los labios de Nowak, Nowak experimentando por primera vez en su vida lo que era la sensación de llorar.
Cuando llegó a ese punto, se sintió sucio. Jinwoo sintió remordimiento, sus emociones fueron sacudidas violentamente. Jay no pudo confesar sus sentimientos a Nowak. Realmente no había una línea así. Jinwoo no pudo plasmar esas palabras en la voz de Jay, fue por eso que… Jay tuvo que morir.
La única manera de liberar a Nowak del pasado era con Jay muriendo. Jay murió amando a Nowak, pero ¿Nowak lo sabía? Ni siquiera Jinwoo estaba seguro de eso, ¿podría haber entendido Nowak que la muerte de Jay fue resultado de su amor?
Afortunadamente, la escena fue interrumpida.
— ¡Corte! Okey. Fue una actuación tan brillante que Jinwoo quedó atrapado dentro de su propia obra.
Eso fue aterrador.
Nowak quedó solo en el mundo, un mundo que le dio la espalda y que alejó a Jay de su lado.
‘Demasiado cruel’.
Jinwoo estaba mirando por la ventanilla del coche, mientras miraba el paisaje a punto de anochecer no pudo dejar de pensar en lo que había visto ese día. Realmente sus libros siempre fueron una manera de expulsar los sentimientos dolorosos que cargaba de joven, al menos era pensaba en su vida pasada.
Pero en ese momento se sentía realmente triste por eso. Y no puedes reescribir el final una vez que la obra está terminada. Cada actor debe seguir el libreto.
— Nos vemos mañana.
— Sí… Nos vemos mañana, gracias.
Jinwoo quiso regresar a la clínica de descanso ese día y estar solo. Cuando Choi Sang se despidió, Jinwoo fue acompañado por la señorita Lee a su habitación y después ella se retiró.
La sensación asfixiante comenzó a sofocar a Jinwoo, quería ir a un lugar donde no tuviera que encontrarse con gente. Por lo que tomó un paseo por uno de los jardines. Incluso antes de morir, Jinwoo solo recordaba esa sensación incómoda en su pecho que lo desgarraba por dentro.
— ¿Ya has llegado? ¿Por qué haces esperar a las personas mayores de esa manera?
Sus pies se detuvieron. La voz de la persona detrás de él era inconfundible. Jinwoo giró su cuerpo como si pensara que lo que había entrado por sus oídos fuera una alucinación.
— ¿Abuela?
Definitivamente era ella. ¿Por qué? ¿Cómo era posible que estuviera ella allí?...
La mujer que se sostenía de un bastón avanzó lentamente, un empleado vestido con ropa de enfermero jaló la silla de la mesa del jardín para que ella se sentara. Después extendió su mano y señaló la silla vacía a su lado.
— Ven, siéntate… Tenemos que hablar.
No era un horario de visita, todo el lugar estaba vacío pero esa persona realmente estaba frente a él. Jinwoo movió sus piernas y se sentó frente a ella.
— ... Ah, Jinwoo… Mi único nieto Omega y lo único que me queda de mi hijo.
— No puedes estar aquí, no tengo relación con la familia Kim, yo ahora…
Sus palabras se quedaron atoradas en su garganta, ¿Ahora..? ¿Qué se supone que debía decir?
— Ahora eres un Omega impreso que fue abandonado por su Alfa… Lo sé, estoy aquí por eso, La familia Han ha roto todos los lazos contigo.
— ¿Qué?
Jinwoo preguntó con un sentimiento de duda. Aparte de que el hecho de que estaba divorciado era algo privado, Han Seo había firmado la autorización para que él fuera un Omega independiente. ¿Por qué?
La mujer frente a él respondió en voz suave, como si no fuera un asunto importante.
— Mi hijo fue estúpido, no supo como tratar contigo. Ahora, estás de vuelta en la familia Kim y yo soy tu guardián, entonces, estás a mi cargo ahora.
— Eso… No es cierto.
La mujer movió la cabeza, haciéndole una seña al empleado y este le entregó unos papeles a Jinwoo.
Jinwoo los miró atónito.
— ¿Cómo…?
No solo estaba su nombre allí, también estaba el de Oh Minji, ¿Cómo pasó? ¿Por qué?
— Seré tu tutora legal y me encargaré de la administración de todos tus bienes, ¿No recibiste la notificación del banco? Tengo que asegurarme de que hagas las cosas bien, por lo que he restringido el acceso a tus cuentas bancarias y tomaré las decisiones respecto a las acciones a tu nombre. Siempre fuiste un dolor de cabeza para mí. Por supuesto habrá un cobró por todo el trabajo que estoy haciendo y…
— ¡No puedes hacer esto!
— Este lugar es demasiado costoso para alguien como tú, por lo que siendo tu guardián he cancelado el contrato y serás trasladado a otro lugar que se adapte mejor a tus necesidades.
— ¿Cómo…? ¿Cómo puede mi abuela ser de esa manera?
En ese momento, unas fuertes manos sostuvieron su cuello y cabeza.
[¡Bang!]
— Agh.
Su rostro fue golpeado contra la superficie de la mesa, provocando que su nariz emitiera un sonido de Crash y comenzara a sangrar.
— No, no, no. ¡Detente! ¡Para esto!
Su mano fue sujetada y se le colocó un bolígrafo en ella que era apretado por el oponente con fuerza.
— Firma… No lo hagas más difícil.
Jinwoo fue presionado por una fuerza desconocida sobre la mesa, ¿Cuántas personas lo estaban sujetando? Su mano que se movía torpemente hizo un garabato irregular y una mancha de sangre salpicó en el papel.
— Bien, entonces te llevaré a tu nuevo hogar.
— ¡Quédate! Todo el dinero, lo que sea, ¡Es tuyo! Por favor… Suéltame.
— ¿Soltarte? ¿Soltarte para que vayas y te abras de piernas a alguno de esos Alfas? La familia ha sido tan humillada por tu culpa, todo el dinero que tienes será usado para dignificar nuestro nombre, ¡No seas presuntuoso!
[¡Zap!]
Una fuerte bofetada golpeó la mejilla de Jinwoo, una vez, dos veces, tres veces. Lo suficiente para desgarrar la tierna carne interior de su boca. Jinwoo mordió ligeramente el interior de sus labios. Su cuerpo estaba siendo sujetado contra su voluntad y la fuerza de su oponente era mucho mayor que la suya.
— ¡¿Tienes idea de lo que es vivir miserablemente?! ¡Ese dinero no es tuyo! ¡Sin la familia Kim no serías nada! Entonces, me aseguraré de hacerte saber tu lugar.
Jinwoo sintió una fuerte necesidad de gritar. No recordaba la última vez que deseo gritar tanto pero en cuanto sus labios se abrieron sintió un tirón en su estómago y su saliva se derramó.
— Bluakc…
La fuerte agresión provocó que el contenido de su estómago fuera expulsado y Jinwoo vomitó. Sintió cómo su cuerpo se enfriaba como si un balde de agua helada fuera derramado sobre él. No fue posible recuperar el aire perdido, la sensación caliente en su estómago se hizo más intensa.
— ¡Ah! No, no. ¡Suéltame!
Una sensación punzante se comenzó a intensificar en su cuello. De pronto, un calor extraño se fue extendiendo desde su cuello hasta sus extremidades y Jinwoo perdió fuerza. La persona que estaba claramente frente a él se comenzó a volver borrosa. Su mente se volvió confusa. Todo su cuerpo respondía torpemente e incluso su visión se nublo.
Su boca se abría intentando pedir auxilio pero solamente escupió un par de balbuceos acompañados de saliva, no era capaz de hablar, ni de moverse. Su estómago comenzó a doler, su visión y audio se distorsionaron y lo invadió una sensación de sueño pesado.
‘Jinwoo, te amo’.
— ¿Señor…? ¿Dón…de?
Su cabeza se colgó de su cuerpo que fue sujetado por su oponente.
— Mételo al auto y salgamos. Mañana será un largo día.
— Sí, tía.
Jinwoo estaba semiconsciente, sintió algo extraño su lengua tenía un sabor metálico que era desagradable y todo a su alrededor daba vueltas. Su cuerpo dolía como si algo lo estuviera desgarrando. Sus músculos y tendones se sentían demasiado tensos como si estuvieran a punto de romper pero no era capaz de moverse. Aún así, fue capaz de sentir como su cuerpo era elevado en el aire y sacudido, pudo escuchar los susurros de las personas cerca de él pero no entendió las palabras.
Su boca escupió un leve quejido, mientras sus ojos buscaban un punto de enfoque. Sintió algo sujetar fuertemente sus muñecas y su cuerpo tocó una superficie muy fría.
Sus ojos se empaparon de lágrimas y su corazón se llenó de frustración.
‘Señor Han Seo… Tengo frío… Mucho frío’.
***
— Señor… He sido notificado de algo inusual.
— ¿Qué…?
Han Seo miró el reporte que entregó su secretario, lo miró detalladamente y solicitó que fuera verificado de nuevo por el equipo de contabilidad.
No había error, era una solicitud de venta de las acciones que puso a nombre de Jinwoo. La cantidad total de venta era excesivamente alta, varios millones de dólares. Jinwoo no necesitaba ese dinero ahora, ¿No era algo extraño?
— Hazlo, transfiere el dinero de las acciones, pero hazlo de una de mis cuentas personales, mantén a Jinwoo como dueño de ellas.
— ¿Señor?
Han Seo le devolvió el reporte al secretario Sujin.
— Eso es todo.
Sujin lo miró con una expresión de que no sabía lo que estaba haciendo, pero solo fueron unos segundos.
— De acuerdo.
Después cumplió con su papel de secretario a la perfección.
Su condición de salud había decaído.
Y el médico le dijo que su cuerpo tendría un severo colapso si viajaba en esas condiciones. Al no estar recibiendo el tratamiento adecuado, podría ser fatal.
Eso hizo que su viaje a los Estados Unidos tuviera que posponerse.
En ese momento, recibió una llamada.
[¡Han Seo! Jinwoo se fue.]
— ¿De qué estás hablando señor Choi?
[La señorita Lee fue detenida afuera de la clínica de descanso, dijeron que Jinwoo informó de su alta voluntaria y se marchó, ¿tienes algo que ver con esto?]
— ¿De qué demonios estás hablando? ¿No se supone que estaba a tu cuidado?
[Intenté contactarme con él, pero no respondió mis llamadas, solo me mandó un mensaje de texto que decía ‘quiero estar solo un tiempo’. ¿Sabes algo?]
— Ah… Mierda, ¿Jinwoo te envió solo ese mensaje?
[Si, el personal de servicio dijo que quería espacio para respirar y tener ideas para escribir. Pero estoy muy preocupado]
— ... Búscalo.
[¿Qué?... ¡Oye!]
Han Seo colgó el teléfono y de inmediato llamó al secretario Sujin.
— ¿Cual es la ubicación del GPS de Jinwoo ahora?
El secretario sacó una tableta y consultó la información en tiempo real.
— Parece que está detenido en un Hotel privado llamado South Beach, Señor.
‘¿Querías tomarte un descanso y por eso te fuiste? Pero tu no eres así ¿qué está pasando?’
— Monitorea su ubicación 24 horas y avisa de inmediato si hay algún cambio.
— Sí señor.
Han Seo estuvo atento a la ubicación del GPS del celular de Jinwoo todo ese día y solo se reportaron movimientos cercanos al hotel. Cuando investigó el establecimiento era uno de los Hoteles Resort más caros de Miami y estaba ubicado en una zona turística de clase muy alta, por lo que pensó que quizás estaba tomando un par de días libres.
Han Seo miró la pantalla de su teléfono celular, era un mensaje de texto.
<¿Vendrás esta noche?>
<Lo haré, ¿te gustó de la fiesta?>
<Han Seo fue espléndido, yo y los invitados la pasamos bien, esperaré por ti>
— ¿Conseguiste las cintas de grabación?
— Si señor, la persona que pusimos allí en la fiesta lo grabó todo. Dado que el joven Jun estaba demasiado intoxicado, el personal de seguridad lo llevó a una suite de hotel.
— Bien. ¿Conseguiste al sujeto?
— ¿Cree que hay Alfa dominantes a la vuelta de la esquina? Es solo un 30% pero estamos trabajando en los detalles para que esté listo.
— De acuerdo.
***
Sostuvo la botella de champagne más costosa de su reserva, la botella de colores dorados fue decorada con un hermoso listón en color tornasol. Por sí sola, esa botella era el regalo tradicional a las parejas que se comprometen en matrimonio.
El ascensor donde viajaba se detuvo emitiendo un sonido de —ding*. Y las puertas se abrieron.
Han Seo avanzó hasta la suite del Hotel donde Tae Jun descansaba después de una larga fiesta.
[Bip, bip.]
Cuando pasó la tarjeta por el lector digital, se escuchó el sonido de la puerta siendo desbloqueada y una corriente de aire impregnada de una feromona muy dulce lo golpeó de frente.
— ¿Has llegado?
Han Seo caminó con una expresión endurecida en su rostro, se acercó a Tae Jun quien vestía una bata de baño ligera. Al estar cerca de él extendió su mano para acomodar un mechón de su cabello rebelde.
No hay vuelta atrás.
— Esto es para ti.
Han Seo le extendió la costosa botella y unas finas manos la sostuvieron, pudo ver como los ojos de Tae Jun brillaban al verlo.
— Muchas gracias, Han Seo.
— Es un regalo por tu interpretación, realmente fue… Perfecta.
El hotel donde se hospedó Tae Jun era uno de los más exclusivos de Seúl, dentro de sus principales atractivos se encontraba una hermosa terraza que mostraba el Río Han siendo iluminado por las luces nocturnas. Ambos se sentaron en una elegante mesa de vidrio que había sido llenada de platillos deliciosos.
La botella fue colocada a enfriar y servida en dos copas de cristal.
— ¿Han Seo? Lo que hiciste, muchas gracias.
Inesperadamente, una esquina de su pecho se estremeció.
Fue como si todos los sentimientos que estuvieron contenidos durante mucho tiempo, finalmente pudieran ser expresados. Con el simple hecho de poder brillar a los ojos de Han Seo era suficiente para hacer que el corazón de Tae Jun revoloteara.
— ¿No es más dulce tu feromona?
— ¿Lo has notado? Si, puse mi mejor esfuerzo para hacer que mi feromona fuera del gusto de Han Seo.
La terraza estaba ambientada con suave música clásica y la brisa era agradable.
[Klin.]
Dos copas de cristal chocaron suavemente entre sí.
— Esto es como un sueño.
— Si, la feromona es tan dulce que parece que voy a flotar pronto.
— ¿Tengo tu favor? Han Seo y yo… ¿Podemos estar juntos?
[Brrrr, brrrrr.]
En ese momento, como si hubiera sido una cosa del destino, el teléfono de su celular vibró. Han Seo miró la botella de Champagne que estaba casi vacía.
Sosteniendo el teléfono en sus manos, Han Seo se levantó de la mesa. En el momento que el cuerpo de Han Seo pasó cerca del suyo una fragante feromona Alfa se derramó sobre Tae Jun.
Su mente quedó embriagada por esa sensación.
Era una feromona muy buena.
Las yemas de los dedos de Taejun estaban barriendo la superficie de la copa que acababa de beber, su rostro se sentía muy caliente como si tuviera fiebre. La combinación inesperada del acelerador de celo y el medicamento para modificar el aroma de su feromona generaron un efecto mayor cuando fue bañado por aquella feromona Alfa con rasgo dominante.
Podía escuchar la voz de Han Seo cerca de él. Mientras hablaba por teléfono la feromona estaba mimando su cuerpo Omega lleno de calor. Su mirada estaba nublada por la sensación de placer que se generó por el contacto de las feromonas.
— ¿Han Seo?
— ¿Si?
Tae Jun miró ese cuerpo alto con espalda ancha, parece que aún estaba hablando por teléfono. Tae Jun se levantó de la silla.
Podía sentir como el fluido comenzaba a concentrarse en su agujero y escurrir por sus piernas. Era fabuloso.
Si Han Seo plantaba su semilla dentro de él mientras estaba en su celo…
Una familia, tendría el bebé de Han Seo en su vientre.
‘Maravilloso’.
Tae Jun se sintió borracho y avanzó torpemente hasta él.
Unos fuertes brazos lo rodearon y un aliento caliente resopló en su nuca.
— Ahhh, ¿Han Seo?
— ¿Si?
— Bésame, por favor, bésame, ugh…
Unos suaves labios se superpusieron a los suyos. La feromona comenzó a envolver su cuerpo llenándolo de un calor insoportable. Su cuerpo fue levantado en el aire y colocado sobre una banca, la sensación dura sobre su espalda era incómoda pero eso no le importaba.
Su corazón latía aceleradamente cada vez que la lengua espesa de su oponente codiciaba su boca. Su parte inferior comenzó a picar cuando sintió un bulto duro y húmedo frotarse contra él.
Los colmillos mordieron el lóbulo de su oreja dolorosamente.
— ¡Ahhh! ¡Siiiii! ¡Soy tuyo!
— ...
Tae Jun se aferró al cuerpo firme y jadeo, ni siquiera se molestó en reprimir los jadeos de su boca.
Sintió unas manos grandes sujetar su cintura y una entrepierna presionando su ingle.
— Han Seo… Han Seo… Estoy en celo.
La ropa era incómoda, por lo que rápidamente rasgó su camisa mientras se abrazaba a su Alfa. Las caricias que sintió no eran amables, pero ¿qué importaba? Si era Han Seo, Tae Jun podría soportar cualquier cosa.
El placer de ese bulto firme frotando su piel caliente era muy bueno.
Sintió como unas manos desabrochaba la creyera de sus pantalones y como la tela fue deslizada hacia abajo. Los hilos de jugo amoroso quedaron como telarañas cuando la ropa interior fue retirada.
— ¡Ahhhhh!
La gran mano barrió los pliegues de su agujero, empapandose con el líquido que brotaba.
— Ahhhhh.
Una lengua caliente barrió la superficie húmeda.
‘Han Seo está besando mi agujero…’
Fue un terrible placer. — ¡Hazlo ya… Por favor… Hazlo ya! Suplicando por la erección de su Alfa, Tae Jun rogó. — ¡Ahhh! Fue un dolor terrible el que sintió cuando los genitales se enterraron en su agujero de un tirón y cavaron profundamente.
Negó con su cabeza ante el placer vertiginoso que derritió su cerebro.
— Más, más… Dame tu semilla.
La erección cavó hasta lo más profundo de él. Sus brazos se aferraron fuertemente a su oponente y no se soltaron.
— ¡Márcame! ¡Hazme tuyo! ¡Han Seo!
La feromona intensa estaba nublando todos sus sentidos, lo único que podía ver eran fuegos artificiales.
— ¡Dios mío!
Un dolor punzante en la zona de su cuello le hizo gritar.
‘Han Seo me está marcando’.
— Ahhh, Ahora yo… Dejame marcarte, Han Seo.
Fue en el momento que sus labios se acercaban a la glándula de feromona Alfa que su cuerpo fue sacudido violentamente.
— ¡Dios mío! ¿Qué demonios está pasando aquí?
— ¿Eh?
Su cuerpo cayó al suelo por el inesperado movimiento.
— ¡Llamaré a la policía! ¿Cómo se atreven a hacer esta clase de actos aquí?
Como si fuera una mentira, su mente comenzó a clarificarse poco a poco.
— ¡Señor! Cubra su cuerpo
— ¿Han Seo?
— ¡Llama al gerente rápidamente y avisa a la policía!
— ¿Policía?
Tae Jun levantó una mano temblorosa al azar, su cabeza aún estaba aturdida pero claramente había escuchado la palabra —policía—. No, Han Seo no podía ir a la policía por algo así.
— ¿Qué está sucediendo?
Cuando sus ojos lograron enfocar al empleado del restaurante la sombra a un lado de él se volvió nítida.
— ¿Qué? ¿Han Seo? ¿Tú…? ¿Cómo?
‘¿Cómo llegó tan rápido allí?’
— Ah, no es mi responsabilidad, este Omega saltó sobre mí mientras salía a contestar una llamada, demonios, es asqueroso.
— ¡¿Qué?! ¡No! ¡Es un error! ¡Señor Han Seo! ¡Yo no sabía…!
— ¿Un Omega que no sabe a qué persona está abrazando…?
Han Seo… ¿Realmente se equivocó? Tae Jun estaba paralizado, sus piernas eran incapaces de sostenerlo. Una chaqueta se deslizó hasta su cuerpo desnudo.
— ¿No es un accidente si un Alfa marca a un Omega? Si resultas embarazado no vayas a creer que me voy a hacer cargo, yo fui la víctima.
Tae Jun miró a la persona que estaba arreglando sus pantalones, ciertamente… Era parecido a Han Seo, pero no al grado de confundirlo. Tae Jun inhaló la feromona que estaba aún en la chaqueta.
No era nada parecida a la de Han Seo. ¿Cómo pudo cometer ese error?
— ¡Han Seo! ¡Han Seo! ¡No! ¡No!
Tae Jun comenzó a arañar con sus uñas la zona de la impronta. Una impronta hecha por un Alfa no se podía borrar sin comprometer la salud de un Omega… Era algo humillante ser un Omega que fue marcado por un celo.
— ¡Señor! ¡Se está lastimando! ¡Deténgase!
Tae Jun empujó al empleado que trataba de impedir que se hiciera daño. Cuando vio cómo el cuerpo de Han Seo se giraba y comenzaba a alejarse sus piernas tuvieron un impulso frenético y corrió.
— ¡Han…!
Su cuerpo fue bloqueado por una fuerte presencia. Un gran hombre vestido con un traje negro bloqueo su paso.
El alboroto comenzó a llamar la atención de los demás comensales que se encontraban en la zona interior del restaurante.
—¿No es ese el violinista que salió en televisión?—
—Vaya, es el señor Jun—.
—Finalmente, es un Omega, no puede negar su naturaleza—.
— ¡No! ¡No! ¡Señor Han Seo! ¡Señor Han Seo!
Han Seo entró en el ascensor y cuando las puertas se cerraron, la voz que llamaba su nombre se había quedado atrás.
— Tsu, eso fue realmente desagradable.
Pero solo era el comienzo.
No había una razón para ser amable.
En ese momento, Han Seo realmente recordó que él nunca se consideró a sí mismo como alguien con esa cualidad.
Cuando el ascensor llegó al subterráneo, el secretario Sujin lo estaba esperando.
— Arregla un pago extra y asegúrate que el video sea difundido.
— Todo está listo Señor, y no tiene que preocuparse, se le dio una suma de dinero considerable por la participación.
— ¿Realmente eso fue lo mejor que conseguiste?
— La modestia no es una virtud del Director General.
***
El miedo.
Algo que experimentó una vez y lo paralizó. Una sensación con la cual nunca antes había estado familiarizado. Sin embargo, el tener miedo y actuar como un cobarde eran dos circunstancias diferentes.
Mirando su reflejo en la habitación del Hotel, era como si el hombre que se miraba a sí mismo no pudiera reconocerse. Una persona que había perdido la capacidad de actuar por ser presa del miedo. Se excusó de muchas maneras para evadir darle un nombre a ese sentimiento que diariamente oprime su pecho y le sofoca.
Es tiempo de dejar de ser un imbécil.
Pensó para sí mismo.
Fue un error dejar que la liebre corriera sola por el campo sin supervisión.
Han Seo estaba consciente de dos cosas.
La primera, no podía vivir sin Kim Jinwoo. Y la segunda, Kim Jinwoo no podía vivir sin él. Ambos eran existencias con la incapacidad de poder racionalizar sus sentimientos. Pero, ¿qué clase de persona puede asimilar fácilmente que su vida dio un salto en el tiempo sin explicación alguna?
— Ah…
No tenía sentido seguir pensando en eso.
Simplemente tomaría lo que era suyo y lo mantendría a salvo.
— Entonces, ¿les tomó tres días localizar a Jinwoo?. Bien, Secretario, despide a todo el personal y contrata gente capacitada. Es absurdo que algo como esto sucediera.
— Señor… Recibí la última información del señor Jinwoo. ¿Qué desea hacer?
Entre el cúmulo de papeles que revisó detenidamente apareció la fotografía de dos personas que Han Seo no identificó a primera vista. Un par de días antes de la desaparición de Jinwoo el departamento de contabilidad recibió la solicitud para liquidar las acciones a su nombre. Como era un proceso ordinario, por supuesto que el personal no conocía los detalles y siguió el procedimiento hasta que llegó a las manos de Sujin.
Fue una acción bastante sospechosa. Sin embargo, era claro que pensó que Jinwoo quería deshacerse de todo lo relacionado con él. Después algo similar sucedió con las acciones de la compañía editorial que colocó bajo el nombre de Jinwoo. Hubo una solicitud de liquidación urgente, Do Yoon quien era el encargado de monitorear todo lo relacionado con Jinwoo le envió un mensaje preocupado por ese hecho y también mencionó que Jinwoo había enviado un mensaje de texto solicitando la cancelación de la publicación de la obra que estaba en proceso.
Sosteniendo la fotografía en sus manos y mirando de reojo el reporte que el secretario le entregó fue muy sencillo de concluir. Jinwoo no era la persona detrás de los mensajes, y dado que la ubicación del gps, así como la larga lista de consumo dentro del hotel coincidía con la estancia de esas dos personas. El teléfono celular de Jinwoo estaba en manos de sus dos primos.
Han Seo tenía recuerdos borrosos del pasado respecto a ellos. Cuando intentaba recordar algo de su vida pasada un punzante dolor bloqueaba su memoria. Era como si su mente estuviera impidiendo que recordara.
— La señora Kim…
— Según el informe en solo dos días ha realizado compras por un importe superior a los 10 millones de dólares que corresponden al 80% de los fondos existentes en la cuenta bancaria del señor Kim Jinwoo.
— ¿Kim Jinwoo?
— Si, se presentó en la oficina de asuntos civiles una solicitud donde el señor Jinwoo solicitó nuevamente el registro familiar, ya nos estamos haciendo cargo de esto. No parece ser legítima.
— ¿Qué dijo la señorita Lee?
— Tiene la matrícula del auto que fue grabado por la cámara de vigilancia frente a las instalaciones de la clínica de descanso. Está a nombre de una de las empresas de la señora Kim.
— De acuerdo, vamos allí entonces, ¿ya tienen a los bastardos?
— Si, están en la casa de seguridad, Cómo usted dijo, tenían el teléfono del Sr. Jinwoo.
— Vamos entonces.
— Sí, el avión está listo.
***
— Jinwoo, despierta.
Una suave mano frotó su cabello despeinado mientras una suave y cálida voz le llamaba. Jinwoo se retorció entre las suaves mantas que envolvían su cuerpo exhausto.
— Dormilón, vamos.
Poco a poco la voz se fue volviendo más familiar, hasta que Jinwoo pudo identificar a su dueño. Jinwoo abrió lentamente sus ojos mientras los rayos del sol entraban por un ventanal.
— ¿Han Seo…?
El interior de sus oídos se llenó de unos suaves susurros, un aroma fragante se filtró por sus fosas nasales.
La feromona del señor Han Seo.
— ¿Qué persona podría ser?
Jinwoo trató de hablar, pero las palabras que se atoraron en su garganta simplemente no salieron.
— No… Solo… Señor Han Seo, ¿podría abrazarme?
La voz fue tan frágil que pensó que quizás Han Seo no habría podido escucharlo, pero en ese momento unos fuertes brazos lo envolvieron en un cálido abrazo. Jinwoo se enterró bajo la protección que le otorgó Han Seo. Su rostro estaba inhalando esa feromona Alfa que tanto había extrañado.
Sin poderlo evitar, sus ojos pronto se llenaron de lágrimas y comenzaron a empapar la tela de la ropa de Han Seo.
— ¿Tuviste una pesadilla de nuevo? ¿Qué tengo que hacer para que dejes de llorar? Si te ve así nuestro pequeño se pondrá triste. ¿Cómo le explicaremos que papá hizo llorar a papi?
— ¿Qué? Tú… ¿De qué estás hablando?
Su rostro se elevó para poder ver directamente a Han Seo, que lo miraba con una gentil expresión mientras palpaba suavemente su espalda dentro del abrazo.
Han Seo abrió sus labios mientras el corazón de Jinwoo se iba acelerando con expectativa.
[Toc, toc.]
— Debe de ser la niñera.
— ... ¿Niñera?
Jinwoo sintió como el abrazo protector se fue disolviendo y un extraño escalofrío recorrió su espalda, Han Seo se incorporó fuera de la cama y avanzó hasta la puerta.
Ahora que lo pensaba más detalladamente, ¿Dónde estaba? Esa habitación no le era familiar, ni siquiera la cama o la ropa que estaba vistiendo.
— Brrrrya.
— Ven, vamos con papi… Papi siempre te mima en las mañanas, ¿no es cierto?
Han Seo puso sus ojos directamente sobre Jinwoo. Jinwoo lo miró con una expresión distorsionada pero no a los ojos, estaba mirando el pequeño bulto bajo una frazada blanca con imágenes de elefantes bebés que se retorcía en sus brazos.
— No es posible…
Su corazón comenzó a sentirse como si estuviera en el final de un gran maratón deportivo. Sus brazos comenzaron a hormiguear con fuerza y la energía se disparó como un ímpetu.
Jinwoo avanzó, extendió sus brazos y recibió aquel bulto escondido bajo la frazada. Sus manos se movieron sosteniéndolo y mientras unos pequeños ojitos de color azul cielo lo miraban.
— Brrrrrya.
El bebé que lo miró escupió saliva por su boquita rosada, sus ojos se abrían y cerraban mientras lo miraban.
— Mi bebé…
Sus brazos se aferraron a esa existencia, el calor que ese pequeño le transmitió fue tan fuerte que parecía que todo su cuerpo se estaba derritiendo. Su boca se cerró por completo, no fue capaz de emitir palabra alguna. ¿Todo había sido un mal sueño?
Jinwoo miró a Han Seo, quien los miraba a ambos de cerca y cuyas manos estaban debajo de las de Jinwoo. Las fuertes manos de Han Seo estaban sosteniendo las suyas que cargaban a un bebé, a su bebé.
Un escalofrío recorrió su espalda en el momento que sintió el calor de esas dos personas muy cerca de su cuerpo.
Había vivido dos veces. Sin embargo, en ninguno de sus recuerdos estaba el rostro de su bebé. Sin embargo, al mirarlo lo supo instintivamente.
‘Mi niño’.
‘La criatura que no pude proteger’.
‘¿Cómo pasó?’
— ¿Quizás… estoy soñando?
— Pfff…
Han Seo se rió cuando Jinwoo dijo esas palabras. Sus delgados brazos realmente podrían sentir el peso del bebé y el calor.
Un dolor agudo golpeó su pecho.
Sintió que su cerebro se volvía un montón de aire y su visión comenzaba a humedecerse. Jinwoo inclinó su rostro hacía el pequeño bebé que lo miraba.
— Yo… Lo siento… ¡Lo siento! ¡Mi pequeño! ¡Mi copo de nieve! ¡Lo siento tanto! Perdóname… Por hip… Favor… Perdóname.
El torrente de emociones se desbordó de su pecho, fue una pesadilla tan terrible que su cuerpo temblaba aferrándose a esa existencia. El dolor y todos los difíciles recuerdos pasaron rápidamente por su mente como una pelicula en blanco y negro.
Unos fuertes brazos rodearon su espalda y su cuerpo fue encerrado en un suave abrazo. Un gentil beso se depositó en su frente mientras suaves palabras entraban en sus oídos y consolaban su alma.
Su mente y su cabeza estaban aún aturdidas por la sensación que lo inundaba. Su corazón estaba tan acelerado que parecía a punto de explotar fuera de su pecho. Y su visión estaba borrosa por las lágrimas.
— Te amo, te amo, Jinwoo. No tienes por qué llorar. Él te ha esperado por mucho tiempo.
— ¿Qué…?
— Nuestro bebé, te ha estado esperando. No dejaba de llorar porque quería estar en los brazos de papi.
— ¿Me ha estado esperando?
— Si, ten cuidado. Podría ser peligroso si el bebé patea por accidente a su hermano pequeño dentro de tu estómago.
— ¿Eh?
Jinwoo miró su estómago, un abultado vientre, que antes no estaba allí, se hizo más grande. Sintió como si sus órganos fueran presionados y desplazados de su lugar por el intruso.
No…
Había visto su ropa hace unos momentos, incluso cuando se levantó su cuerpo era ligero.
— Entonces… Esto no es real.
Han Seo sostuvo al bebé de los brazos de Jinwoo y lo miró.
— Todo esto es real, mi esposo aún está dormido.
Jinwoo comenzó a sentirse extraño, el aroma a leche en polvo, o la feromona de Han Seo que había percibido claramente antes ya no estaban. No, definitivamente estaba bastante despierto pero las sensaciones que hasta hace unos momentos lo inundaron se habían esfumado.
— No, no… Si esto no es real… ¿Qué puedo hacer?
— Quédate… Jinwoo, toma mi mano. Ven, nuestro bebé se siente tan solo.
— ¿Puedo quedarme? ¿Realmente… ¿Puedo quedarme?
[Tiiiiiiiiiiiii, tiiiiii.]
Un fuerte sonido chirriante perforó sus oídos.
Su cuerpo se sintió tan pesado y sus fuerzas se drenaron como la sangre derramándose fuera de su cuerpo.
— Ah.
Cuando jadeó por la sensación vertiginosa sintió un tirón en su estómago y una sensación caliente quemando su esófago.
[¡Buagh!]
Sin poder moverse adecuadamente el contenido de su estómago fue expulsado al suelo. Jinwoo trató de sostenerse pero sus brazos punzaron dolorosamente y la fuerza en su cuerpo era tan escasa que no pudo impulsarse.
— Tengo… Frío.
Sus ojos estaban borrosos, sus oídos aturdidos y su cuerpo no respondía a los movimientos que ordenaba.
A lo lejos pudo identificar una luz, quizás era una ventana. Si, un poco de aire fresco podría ayudarle a sentirse mejor. Jinwoo intentó arrastrarse hasta la distorsionada luz, pero algo se lo impidió.
Sus pies se sentían más pesados de lo usual y no podía moverlos a voluntad.
— Ah… Alguien… Alguien…
Su garganta áspera pudo escupir unas pocas palabras pero el sonido era tan débil que parecía un susurro.
[¡Slam!]
Un fuerte aroma a desinfectante se enterró en sus fosas nasales cuando el ruido de una puerta abriéndose fuertemente entró en sus oídos. Jinwoo suspiró aliviado pensando que estaba en un hospital. De ser así, no había nada de qué preocuparse.
Unas siluetas blancas se comenzaron a acercar a él, su cuerpo fue sacudido y sintió un tirón en su brazo.
— ¿Eh? ¿Quién?
— Vaya, se despertó… ¿Cuánto medicamento usaste?
— Aplicamos tres veces la dosis, parece que ha comenzado a generar tolerancia. Esto será un problema porque el medicamento es muy costoso.
— Si lo único que tenemos que hacer es mantenerlo así… ¿Por qué no mezclar el medicamento con inhibidores para Alfa? Si es un Omega, eso será lo suficiente como para dejarlo como un imbécil.
— ¡¿De qué hablas?! Si le da un choque de feromonas, ¿Quien será el responsable?
— ¿Y eso qué? Si no abres la boca, nadie sabrá… Miralo, lo dejaron aquí porque un Alfa lo abandonó después de marcarlo.
— Ah, de acuerdo, no es nuestro problema de todos modos.
Uno de los enfermeros hurgó dentro del carrito de medicinas que estaba en el exterior de la habitación. Un sonido de frascos cliqueando resonó y después volvió a ingresar a la sala donde estaba Jinwoo.
Después de colocar la mezcla de líquidos en una jeringa el brazo lleno de hematomas violetas fue extendido con fuerza.
— No te muevas.
— ¿Eh?... No… Favor… No… Duele.
La sensación dolorosa se comenzó a filtrar por sus venas, fue como una gélida sensación que se extendía por todo su torrente sanguíneo.
— Ah…
Todo a su alrededor volvió a distorsionarse y su cuerpo dejó de responder.
Jinwoo fue dejado en la misma colchoneta y los enfermeros cerraron la puerta tras él.
Nuevamente hacía frío.
***
La sensación vertiginosa, el frío y el dolor punzante se desvanecieron como si hubieran sido un sueño. Las imágenes residuales que inundaron su cerebro estaban mezcladas. La realidad y la fantasía se mezclaban.
— Jinwoo, ¿Estás despierto?
Su cuerpo se retorció en una manta muy suave y cálida. Incluso el aroma de la habitación comenzó a despertar sus sentidos.
— ¿Han Seo?
Cuando abrió los ojos vio a Han Seo a su lado, estaba vistiendo ropa informal, unos jeans con un suéter de punto color beige. Era tan extraño verlo sin traje formal. Siempre era así. Donde fuera que estuviera, cuando sus ojos se abrían, Jinwoo esperaba ver a Han Seo. Jinwoo tenía una expresión desolada en su rostro. Su mente estaba confundida por la pesadilla que lo arrastró a una confusión espesa.
— Tuviste fiebre toda la noche, el doctor vino a verte y dijo que pescaste un resfriado, te puso medicamento por vía intravenosa.
— ¿Medicamento?
Jinwoo miró su brazo y allí estaba un hematoma violeta. Suspiró aliviado en el momento que procesó esa información. Quizás por los efectos del resfriado su mente fue más allá y comenzó a soñar cosas extrañas.
— ¿Estás bien? ¿Por qué lloras?
¿Eh?
Fue solo cuando las suaves palabras de Han Seo llegaron a sus oídos que Jinwoo se percató que sus ojos estaban cristalinos y que unos suaves canales de lágrimas se deslizaban por sus mejillas.
— Solo… Abrázame, por favor, tuve un mal sueño.
— ...
Han Seo respondió a su solicitud, sin levantar su mirada, Jinwoo sintió como el calor corporal de su oponente comenzaba a acercarse y unos brazos fuertes lo envolvieron. Una serie de suaves besos cayeron sobre su rostro. Mejillas, pómulos, nariz, barbilla, frente, labios. Todo su rostro fue llenado de dulces besos. Los labios de Han Seo pronto fueron codiciados por Jinwoo, quien se acercó y demandó un beso profundo.
— Nuestro paciente se despertó animado hoy.
— Si, es bueno despertar y ver el rostro de Han Seo.
En el momento que Jinwoo le mostró una gentil sonrisa, Han Seo lo abrazó con más fuerza y le dio unas suaves palmadas en su espalda.
— Siempre estaré con Jinwoo, lo prometí cuando nos casamos. ¿No lo has olvidado?
Jinwoo permaneció con la boca cerrada mientras gruesas lágrimas comenzaron a empapar su rostro. Han Seo se subió a la cama y se acostó colocando la cabeza de Jinwoo en su pecho sin dejar de abrazar su cuerpo.
— Shh, solo fue una pesadilla, estamos a tu lado. Tranquilo. ¿Cómo le podré explicar a nuestro hijo que papi está llorando?
— ...
¿Nuestro hijo? las palabras que se derramaron de nuevo como un deja vu fueron como un balde de agua helada. Jinwoo abrió la boca pero no fue capaz de decir nada. ¿Era eso un sueño o su realidad? Miró a su alrededor, definitivamente era una habitación que le resultaba poco familiar, mientras sus ojos buscaban afanosamente un rastro de algo extraño, su corazón se llenó de ansiedad y comenzó a sentir un golpeteo muy fuerte y rápido en su pecho.
Las yemas de los dedos de Han Seo que lo acariciaban no le producían calor. Y en ese momento a pesar de estar siendo abrazado ya no podía sentir el calor corporal de Han Seo. No lo sabía, la desesperación de no saber cuál era su realidad lo estaba consumiendo. Cuanto más tiempo permanecía pensando, más su cabeza parecía explotar.
— ¡Jinwoo!
— ¿Eh?
Sintió un líquido espeso y caliente salir de sus fosas nasales acompañado de un olor metálico. Su mano se movió instintivamente y frotó la punta de su nariz.
Un líquido espeso rojizo estaba impregnado en sus dedos.
— Sr. Han Seo… Creo… que… enfermo…
Todo a su alrededor se volvió silencioso y oscuro en un instante. Cuando cerró sus ojos, le fue difícil volverlos a abrir por la sensación de pesadez en sus párpados.
Después de un tiempo, Jinwoo sintió como si algo estuviera mojando su mejilla y perezosamente abrió sus ojos. Su cuerpo estaba temblando de frío y sintió que su piel estaba muy expuesta.
Estaba aturdido, como si estuviera embriagado o bajo el efecto de un medicamento para el resfriado, ni siquiera era capaz de mover sus piernas.
— … Ayu…
Su voz estaba ronca y cuando intentó pedir ayuda se sintió como si sus cuerdas vocales se estuvieran desgarrando. El olor a metal de la sangre se enterró en su nariz y su estómago se revolvió.
Jinwoo esperó y esperó, fue como si las sensaciones de frío y dolor comenzarán a despertar sus sentidos aturdidos. Después de mucho tiempo fue capaz de recuperar un hilo de conciencia.
Se percató que estaba en una habitación deteriorada, el olor astringente tan fuerte que su nariz comenzó a punzar, el piso era de piedra y se sentía muy frío, pero no había ventanas, la única luz que se filtraba al oscuro espacio era la que provenía de la rejilla de una puerta de hierro.
Además…
Estaba desnudo, su cuerpo estaba tan frío que sus extremidades se encontraban entumecidas. Un dolor desgarrador comenzó a obstruir su pecho, las lágrimas se desbordaron sin que se pudiera contener pero como no quería gritar se mordió fuertemente su antebrazo, intentando ahogar sus gritos.
Deseaba morir…
Fue arrastrado hasta el límite y realmente ya no quedaba nada de él.
Un cuerpo quebrantado, reducido a escombros y un corazón hecho jirones. Se dejó caer al suelo, enredándose en sí mismo mientras la oscuridad consumía su mente. Cerró los ojos y se perdió en un vacío abismal, donde solo había dolor y desesperación.
Después de un tiempo, sintió sus dientes castañeteando entre ellos, incapaces de controlarse. La necesidad frenética de comer y beber consumía su ser, pero su estómago estaba vacío y sus entrañas ardían con punzadas de hambre insaciable. Era una agonía sin fin, una tortura que no parecía tener fin.
— Ugh…
Con un esfuerzo sobrehumano, Jinwoo se arrastró desesperadamente hacia la puerta. Cada centímetro de su cuerpo gritaba de dolor y agotamiento. Con un grito ahogado, extendió su brazo en busca de algo que le ayudara a levantarse, pero una punzada aguda en la parte interior de su codo lo hizo retroceder con un gemido de angustia. Como si una fuerza invisible estuviera tirando de él hacia atrás.
— Ay…
Al principio, sus sentidos estaban embotados y no pudo darse cuenta de su presencia. Pero ahora, con una mayor claridad mental, pudo percibir al hombre parado frente a él. Vestía un impecable uniforme blanco, que resplandecía bajo la luz del sol como un faro en medio de la oscuridad.
Era la primera persona que veía en mucho tiempo, pero… Su mente estaba tan confundida que Jinwoo no sabía si esto era también un sueño o su realidad.
— Es un problema si genera tolerancia a la droga, no solo tendrás adicción sino que también podría ser peligroso suministrar medicamento excesivamente… ¡¿Qué es ese olor?!
— ¿Eh…?
El hombre de traje blanco avanzó hacia él.
— Cielos, ¡ni siquiera pudiste contenerte! ¡Que asqueroso Omega!
El hombre puso su pie sobre el estómago de Jinwoo y lo empujó.
— ¡Puagk!
Un escalofrío recorrió su columna vertebral cuando sintió la presión, un peso inesperado en su interior que hizo que su cuerpo se tensara como una cuerda de arco. La sensación era similar a una explosión, como si la piel interior de sus entrañas hubiera cedido ante la presión abrumadora. Un intenso calor comenzó a extenderse por todo su abdomen, envolviéndolo con una sensación ardiente y casi dolorosa. Era como si un fuego interno estallara en su ser, consumiéndose desde adentro hacia afuera.
— Terminemos con esto rápidamente.
— No… Yo… Por favor. ¡No! ¡Por favor!
Jinwoo luchó con todas sus fuerzas para rebelarse y resistir, pero su esfuerzo resultó patético. No podía ni siquiera ponerse de pie o articular palabra debido a la debilidad y el dolor que sentía en todo su cuerpo. El hombre, cuya presencia era intimidante, sujetó su brazo con una fuerza implacable. Jinwoo sintió un escalofrío al ver cómo la punta afilada de una aguja brillaba amenazadoramente frente a él. El hombre lo obligó a exponer la piel herida de su brazo, y con un gesto cruel insertó la aguja en ella, como si estuviera atravesando su alma.
Fue entonces que…
[¡Bang!]
— ¡Agh!
Un contundente golpe hizo explotar la cabeza del hombre y su cuerpo se derrumbó en el suelo. La mente confusa de Jinwoo no pudo procesar lo que estaba pasando a su alrededor. Si, este era un sueño…
Su realidad no podía ser así.
Jinwoo instintivamente se hizo bolita y se quedó en el suelo.
— ¡Jinwoo!
Su mente estaba invadida por una espesa niebla, Jinwoo pudo identificar la voz de Han Seo. Definitivamente era su voz. Pero estaba demasiado exhausto como para poder responder.
‘¡Encuéntrame! ¡Aquí estoy! ¡No me deje solo!’
Si hubiera podido gritar, definitivamente esas palabras serían las primeras en salir de su boca.
— ¡Oh por Dios! ¡Espera! ¡No dejes entrar a nadie!
Fue el secretario Sujin quien detuvo en la puerta a Choi Sang y forcejeó con él para impedir que entrara a la habitación.
— ¿Qué demonios?
— ¡No entre! ¡No entre! ¡Por favor Sr. Choi!
Han Seo se quedó de pie frente a Jinwoo, su mirada escaneó todo su cuerpo y la escena que estaba frente a él…
Sus puños se cerraron y sus ojos se tiñeron de sangre.
— ¡Director! ¡Jinwoo!
El cuerpo de Han Seo se deshizo de su abrigo, cubriéndolo por completo. Sus brazos enlazaron su cuerpo y lo rodearon como un fuerte escudo protector, dispuestos a protegerlo de todo mal que pudiera acechar en la oscuridad de la noche. Eran como dos imanes, unidos por una fuerza inexplicable e irrompible que iba más allá de la razón. Su presencia cálida y reconfortante lo hacía sentir seguro y amado, casi como si fuera un pequeño pájaro protegido.
— Todos, fuera de aquí.
Han Seo ordenó que todos salieran y protegió a Jinwoo como una gran coraza para que nadie pudiera verlo.
— ¡¿Eres un imbécil?! ¡Déjame verlo! ¿Está bien? ¡Han Seo! ¡Han Seo! ¡Suéltame!
Los guardaespaldas actuaron rápidamente, deteniendo a Choi Sang antes de que pudiera acercarse más a Han Seo y Jinwoo. Choi Sang gritó en frustración, pero Han Seo no iba a permitir que nadie viera a su amante en esa condición vulnerable.
Con una determinación feroz, Han Seo levantó el cuerpo de Jinwoo y lo llevó hasta la ambulancia que estaba esperando. La luz del sol era cegadora mientras se abrían las puertas traseras, revelando un interior blanco y estéril. Antes de dejar cuidadosamente a Jinwoo en la camilla, Han Seo le habló en voz baja al personal médico que ya estaba preparado para recibirlo.
Las puertas se cerraron con un golpe sordo y Han Seo finalmente liberó a Jinwoo de sus brazos protectores. Sus ojos seguían fijos en su amante mientras la ambulancia se alejaba a toda velocidad hacia el hospital más cercano.
Una vez que todo había terminado, Han Seo bajó de la ambulancia y se encontró con el secretario Sujin, quien había estado esperando ansiosamente durante toda la escena. Había una mezcla de preocupación y alivio en su rostro mientras miraba a Han Seo.
— ¿Sacaron a todos?
— Si, hemos rescatado a los que estaban encerrados, están siendo trasladados a hospitales de la zona.
— ¿Y los empleados?
— Quedaron encerrados dentro.
— Entonces… Termina el trabajo.
— Sí, director.
El secretario Sujin se apartó de su camino, dejando a Han Seo con una visión clara de Choi Sang. Con un gesto casual de su mano, ordenó a los guardaespaldas que liberaran al hombre. Furioso, Choi Sang avanzó hacia él con pasos pesados, sus ojos llenos de ira contenida. Pero en realidad, su destino no era él, sino la ambulancia estacionada a poca distancia.
— Maldito hijo de puta… ¡Hacerme esto!
— Sr. Choi, esto es un pedido sincero, no una orden. Entonces, por favor, no entres… Podrás verlo después, no me opondré.
— ¿Qué carajos…?
Entonces se percató de que había un extraño aroma impregnado en la ropa de Han Seo, un aroma agrio y penetrante. Sus sentidos se vieron invadidos por él, como si fuera una nube tóxica a su alrededor. Observó a Han Seo, cuyos rasgos parecían distorsionados por el dolor y la angustia. A pesar de su aparente indiferencia, podía sentir que estaba al borde del colapso emocional. La sangre en sus ojos era una señal clara de su lucha interna, y sus labios temblaban ligeramente mientras luchaba por contener las lágrimas. Aunque su expresión era dura y fría, había una intensa tormenta emocional en su interior que amenazaba con desbordarse en cualquier momento.
— ¿Es tan mala su condición?
— No es algo que se pueda ver. Solo te pido, respete la dignidad que le queda.
— ... De acuerdo, entonces iré siguiendo la ambulancia.
— Está bien.
Una vez que Han Seo estuvo dentro del auto, llevó sus manos a su cabeza, se inclinó y su corazón se hundió en una desesperada sed de sangre.
[¡Bom!]
Cuando estuvo considerablemente lejos, se escuchó una explosión y un lugar en medio de la nada comenzó a arder en llamas.
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