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(10) El amor no es la respuesta cap 9


La suave seda se deslizaba por el espacio de la camisa que rodeaba su cuello. Una sensación palpitante golpeaba aceleradamente su pecho desde el interior. 


Ese día, al igual que hace dos años y medio, estaba a punto de dar el primer paso que lo llevó a conocer formalmente a Kim Jinwoo, la persona que después se convertiría en su cónyuge. 


Han Seo, que terminaba de ajustar los últimos detalles de su corbata, no recordaba realmente qué había pasado en esa exhibición de arte. Sin embargo, si recordaba vagamente la expresión de Jinwoo durante sus primeras convivencias, estaba como un ciervo asustado siendo perseguido por un cazador… No.


Han Seo estaba confundido. 


¿Jinwoo estaba ese día allí? Estaba seguro que si. Sin embargo, su diario decía que no había podido asistir por una lesión que tenía. 


Fue descuidado, estaba tan ocupado atendiendo la solicitud personal de Jinwoo que por un momento su mente divagaba confusa entre los recuerdos de su vida pasada o futura y lo que estaba escrito en ese diario. 


¿Cuándo fue que su memoria comenzó a nublar la línea temporal de aquellos recuerdos?


Después del acuerdo al que llegaron ese día en su oficina. Jinwoo se despidió con una hermosa sonrisa. Han Seo estuvo muy ocupado moviendo todos sus contactos posibles y haciendo un rastro financiero por debajo del agua para saber qué pieza del tablero debía mover.


El dinero es difícil de ocultar, aunque lo muevas por muchas instituciones bancarias, fondos de inversión o fideicomisos internacionales al final todo deja un rastro.


No fue difícil para Han Seo encontrar el peón que necesitaba mover estratégicamente. Si Jinwoo deseaba darles una lección a esas personas. Han Seo aprovecharía ese “daño colateral”  para que en el futuro esa familia no pudiera lastimar a Jinwoo. 


Aun así, el tema tenía que mantenerse completamente a reserva hasta que pasara el evento de exhibición de obras.


Han Seo hizo todo lo que Jinwoo le pidió y mucho más. Se aseguraría de proteger por completo a Kim Jinwoo bajo cualquier medio posible.


— Secretario Sujin, una vez que estos reportes estén validados tiene que enviarlos con el primer maestro de la familia Lee.


[Sí, director.]


Colgando el teléfono celular, se dirigió directamente hacia el lugar de la exhibición. No sin antes mandarle un mensaje a Jinwoo. 


[Nos veremos pronto.]


***


Realmente entendió las palabras de Jinwoo en ese momento. Las obras de arte eran peor de lo que su mente recordaba. Comenzó a ser evidentemente una mezcla de estilos al azar sin ningún tema o especialidad en particular. Era como ver piezas ordinarias que se vendían en centros comerciales en masa. 


Las técnicas utilizadas eran tan distintas que era difícil afirmar que lo hubiera hecho una sola persona, la huella digital del artista está en su técnica, pero claramente allí no había ningún estilo, inclinación o inspiración. Eran piezas colgadas al azar. 


Desde pinturas de flores abstractas, frutas, retratos, hasta pinturas inspiradas en el renacimiento, el postmodernismo y… ¿Animales?


No era que fuera un fanático del arte, pero si esperaban ganar dinero con eso, hubieran pensado en buscar al menos algo un poco más sofisticado. 


Por supuesto el discurso del artista fue la mejor parte. Kim Juwon ni siquiera sabía identificar qué corriente o qué técnica fue empleada para la creación de las obras.


Solamente estaba hablando de niños pobres, hambrientos y necesitados que iban a recibir un cuantioso plato de comida después de esa noche.


Sorprendentemente, las imágenes que pasaron por medio de un proyector que estaba dirigido hacia una pared, fueron muy convincentes. Registros fotográficos de ‘Save Children's’ inundaron por 3 minutos la pared y por supuesto, fue una mercadotecnia perfecta.


Tanto el presidente Kim como su primogénito,  Kim Juwon fueron felicitados por su sentido altruista. Y después de unas horas, el resultado final fue mucho más lejos de lo esperado.


[12,000,000.00 Usd]


Fue la cantidad final recaudada. Los ojos de ambas personas brillaron codiciosamente. 


Durante el brindis de celebración, el presidente Kim se acercó al presidente Han y su esposa. Después de conversar un par de minutos, las tres personas fueron hasta donde estaba Han Seo.


— Hijo, ¿estás pasando un buen momento?


— Ha sido un momento agradable, madre.


— Me alegra que la familia Han haya aceptado esta invitación. 


En ese momento, una mano de mediana edad se extendió hasta Han Seo. 


— ...


Han Seo se sintió sucio al momento de estrechar la mano de la persona que lanzó a su hijo Omega por el foso de la desesperación y huyó sin dejar rastro.


— Deseo aprovechar este momento para presentarle a mi hijo, Kim Jinwoo es un poco tímido, por lo que no asiste a este tipo de eventos a menudo.


— Realmente fue una sorpresa saber que había un Omega dentro de la familia Kim, estoy feliz de poder conocerlo. 


— Ah… Han Seo, ahora que lo pienso. Mi hijo y usted tienen un rango de edad similar, ¿no es eso curioso?


— ¿Su hijo ha venido hoy?




— Sí, se está recuperando de una caída que tuvo hace un par de días, por lo que no puede estar mucho tiempo de pie aún. Sin embargo, si va a la sala de descanso puede verlo.


Volvió a suceder, realmente esos bastardos habían herido nuevamente a Kim Jinwoo. Las oraciones en ese diario sobre un incidente no eran reales,  Han Seo sabía que todo eso era el resultado de actos violentos hechos por su padre y hermano.


— ¡Han Seo! Si el hijo del presidente Kim tuvo un incidente, ¿no sería buena idea ir a verlo por si necesita ayuda?


Dijo amablemente su madre con una gentil sonrisa. 


— Sí tengo el permiso del presidente Kim, será un gusto poder ir.


— Kim Jinwoo estará feliz de verte. 


La situación era extraña. Había pasado algo. Han Seo sabía que Jinwoo no estaba allí. Esas acciones que estaba presenciando no eran las mismas que estaban en su memoria. Aún así, si Jinwoo estaba herido nuevamente, debía llevarlo al hospital. Al fin y al cabo su tarea ya había concluido y el secretario Sujin se quedaría para hacerse cargo del espectáculo posterior. 


A medida que salió del salón principal y atravesó el pasillo hasta llegar a la zona de espera, donde las habitaciones estaban equipadas como camerinos, un aroma intenso y casi agresivo se enterró en su nariz. Era una mezcla de sudor, feromona y perfume, todos compitiendo por ser el olor más dominante. 


El aire estaba cargado con la anticipación y los nervios de los artistas mientras se preparaban para salir al escenario.


Un aroma intoxicante inundó sus fosas nasales, con una embriagadora feromona sexual que se clavaba en su mente. Una fragancia tan penetrante y seductora que parecía agujas enterrándose en su ser. Era la feromona Omega de alguien conocido, pero imposible. Kim Jinwoo era un Omega recesivo, incapaz de entrar en celo. 


Siguiendo el rastro del olor hasta una de las habitaciones, Han Seo se quedó de pie frente a la puerta por donde se filtraba esa poderosa feromona. 


¿Debería abrir la puerta? ¿Acaso había un Omega en celo dentro de ese edificio, rodeado por varios Alfas? ¿Qué posibilidades había de que una casualidad así ocurriera? Sus pensamientos se nublaron ante la intensidad del aroma y la incertidumbre de lo que podría encontrar al otro lado de la puerta.


No…


Antes de entrar, Han Seo tomó su teléfono celular del bolsillo interior de su saco, deslizó sus dedos por la pantalla y después presionó algunas palabras.


[Toc, toc.]


— ¿Sr. Kim Jinwoo? ¿Se encuentra bien?

El silencio era ensordecedor. Han Seo se preguntó si el efecto del inhibidor que consumía para controlar su feromona como Alfa dominante sería suficiente en ese momento.

Desde que se manifestó como un Alfa dominante, Han Seo había sufrido innumerables conflictos con Omegas desde que estaba en la secundaria. Sus padres incluso tuvieron que contratar a un equipo legal que estuviera siempre al servicio de su hijo. Un hombre cuyo título de Alfa dominante no solo lo hacía atractivo, sino también heredero único del presidente del conglomerado más importante del país. Su físico, imponente y musculoso, hacía que muchos hombres tiemblen ante él y que las mujeres cayeran rendidas ante sus encantos.

Bebidas con aceleradores de Rut, Omegas en celo encerrados en el baño inesperadamente, incluso a la edad de 16 años se presentó un Omega de 30 años diciendo que Han Seo era el padre del bebé en su vientre…


Ante eso, Han Seo desarrolló una hipersensibilidad a la feromona Omega, teniendo que utilizar inhibidores para que sus sentidos no fueran estimulados por las feromonas.  Es decir, que gracias al uso de estos medicamentos,  Han Seo no era afectado por la feromona de los Omegas, incluso en ciertos casos, le era imperceptible. 


Pero lo que estaba filtrándose por esa puerta era una feromona tan intensa que su nariz le dolió por un instante. 


— ¿Jinwoo? Soy yo… Voy a abrir la puerta. Tomé un inhibidor esta mañana, no te haré daño.


Después de esperar por una respuesta, un sutil quejido se escuchó. 


— Ah…. No…. Usted es un Alfa… No entre… No entre…


— He solicitado a un médico que venga de inmediato, traen medicina para ayudarle. Hasta entonces puedo cuidarte.


— No… Esto no… Ah… No es…. Ugh… No es un periodo de celo… No lo es… Snif, snif.


Jinwoo estaba llorando, Han Seo estaba seguro. Sin embargo, sin su permiso no podía entrar allí. Un Omega en celo es muy sensible a estímulos violentos. Si Han Seo causaba una fuerte impresión sobre él, Jinwoo podría tener un choque de feromonas. 


— Déjame ayudar… Por favor.


— No me lastimes… Duele, duele mucho.


'No me lastimes… Duele, duele mucho'. 


En ese momento, Han Seo sintió que esta situación le era extrañamente familiar. ¿Por qué?


***


Su cabeza se sintió muy pesada, era como si su cerebro estuviera lleno de agua. Su cuerpo se sentía extrañamente caliente y le fue difícil controlar su feromona.


El trabajo en la compañía se alargó y regresó muy tarde a casa ese día.  La presión en su cabeza era densa, como si algo estuviera conteniendo fuertemente dentro de su cuerpo. En ese momento, incluso el simple acto de respirar le era difícil. El cierre repentino de la garganta y la extraña sensación de náusea que le nublaba la vista.


En el momento que sintió que su cuerpo era tan pesado como para caminar, sintió algo cálido aferrarse a su pecho. 


— ¿Sr. Han Seo?


— ¿Jinwoo? ¿Qué…?


— El señor Han Seo luce muy mal, ¿Desea que llame a un doctor?


Jinwoo pasó un brazo por debajo de la axila de Han Seo e intentó apoyarlo para que no colapsara. Su rostro estaba sonrojado y estaba empapado en sudor frío. 


— No… Lo siento ¿Podría ayudarme a llegar a la habitación?


— Si… Caminemos despacio.


Han Seo sintió las delicadas extremidades que temblaban por sostenerlo y no dejarlo caer. Jinwoo no era una persona de constitución fuerte, pero estaba demostrando mucho cuidado mientras lo ayudaba.


A pesar de tener los ojos brumosos, pudo ver la expresión ansiosa en los ojos de Kim Jinwoo. Eran unos ojos que siempre lo miraban con un brillo tan especial. 


La pequeña nariz afilada que estaba tan cerca de él, la barbilla que estaba inclinada y la piel de su cuello que era blanca como la porcelana más fina. 


Era un ser tan hermoso. 



En ese momento, el corazón de Han Seo comenzó a latir aceleradamente al momento de que un sutil aroma se filtró en su nariz. Apenas estaban subiendo las escaleras pero su cuerpo comenzó a sentirse mareado. 


El aroma que fue percibido de una forma tan fugaz desapareció. El calor que le transmitía el pequeño cuerpo pegado al suyo era tan agradable. 


— ¿Es olivo dulce… ? ¿La feromona de Kim Jinwoo?


— ¿Eh…? ¿Mi feromona..? ¿Por qué está preguntando el Sr. Han Seo por eso?


— Hazlo, fue agradable… ¿Puedes hacerlo un poco…? Creo que me sentiré un poco mejor si huelo a Jinwoo.


— ...


Jinwoo titubeo, pero no lo soltó o se detuvo y sus temblorosas extremidades siguieron aferrándose a Han Seo.


— Es dulce… Me agrada. 


Con las mejillas completamente teñidas de un hermoso color rosado, Jinwoo liberó solo un poco de feromona, fue una acción muy torpe y sutil. Fue tan suave que parecía una feromona expulsada por accidente, como la de hace unos momentos. 


En ese momento, Han Seo inhaló profundamente por la nariz y dejó que ese aroma tan suave que parecía escapar de él llenara sus pulmones. En ese momento, su cuerpo, que parecía estar congelándose, en un instante comenzó a llenarse de un calor palpitante que se extendía por todo su cuerpo. 


— Ah… Espere… Sr. Han Seo…


En ese momento, escuchó un pequeño jadeo por parte de Jinwoo. Qué estaba temblando como una gelatina. 


— ¿Soy tan pesado…?


— No… Su feromona… Es tan… Ah.


Jinwoo llevó rápidamente su mano hacía su abdomen bajo. La acción de ocultar algo desesperadamente provoca en la mayoría de los casos el efecto contrario. La feromona que era tan sutil hace unos momentos comenzó a desbordarse. 


Jinwoo que estaba retorciéndose ante la feromona Alfa dominante que explotó en ese momento, no fue capaz de hablar y solo mantuvo su mano en el vientre bajo. Han Seo miró con ojos brillantes lo que estaba pasando en el cuerpo de Kim Jinwoo. 


Su feromona Alfa estaba completamente fuera de control y estaba impregnándose en el cuerpo tembloroso de Jinwoo que no era capaz de mantenerse en pie mientras jadeaba. En ese instante, su cuerpo estalló en llamas. 


Una gran fuerza sujetó la estrecha cintura de Jinwoo y la jaló con fuerza, sus pies se levantaron del suelo y fue elevado como una pluma. La fuerza que antes estaba ausente en su cuerpo se despertó de inmediato. 


El cuerpo elevado era tibio, pero la molesta tela le impedía disfrutar del aroma que estaba saliendo de cada poro de esa piel. 


En pocos segundos Han Seo acorraló a Jinwoo en la cama. El aliento caliente similar al de una bestia soplaba muy cerca de su boca. 


Fueron unos segundos los que ambos permanecieron a escasos centímetros de tocarse, sus corazones acelerados parecían querer salir de sus pechos y fundirse mutuamente. 


Sus ojos se devoraron entre sí, el brillante deseo de la codicia estaba tan presente. Sin embargo, durante esos segundos que parecieron una eternidad ninguno de ellos profundizó el tacto. 


— ¿Puedo besarte?


Fueron las palabras que pronunció Han Seo mientras barría la mejilla ruborizada de Jinwoo. El pequeño cuerpo debajo de él se estremecía mientras algo comenzaba a endurecerse en el vientre bajo. La feromona Omega estaba revoloteando y toda su piel se erizó. 


Inesperadamente, unos suaves y delgados brazos se enredaron en su cuello y Jinwoo presionó suavemente sus labios con los suyos.


La piel suave y regordeta del labio que dejó un rastro de calor estimuló intensamente la codicia de Han Seo. Eso no era un beso, era solo un gentil jugueteo.


Las manos que sujetaban la delicada cintura tomaron más fuerza y la pelvis de Jinwoo se pegó más a su cuerpo. 


Las presencias emocionadas de sus cuerpos comenzaron a hacerse notar cuando la fricción fue inevitable.


— Ah…


La cabeza que se echó hacia atrás fue detenida por la mano libre de Han Seo y la empujó nuevamente hacia el frente,  esta vez el beso fue codicioso. Una lengua carnosa se abrió paso sobre la boca caliente y comenzó a enredarse en el interior de Jinwoo. 


La saliva era tan dulce y estaba impregnada de una feromona Omega espesa que se transmitió a su cuerpo Alfa. 


Mientras el beso estaba estimulando sus sentidos, la mano que sujetaba la cintura de Jinwoo comenzó a deslizarse por debajo de la tela de la ropa. La temperatura de Jinwoo era caliente, como si estuviera hirviendo y su piel era como de gallina. 


— Mmm…


Su cuerpo comenzó a sacudirse ante lo que parecía la falta de aire y fue en ese momento que Han Seo se alejó. 


— Ah…. Han Seo… su feromona… Duele… No lo haga…


— ¿Dónde? ¿Dónde te duele?


Han Seo ya sabía a qué tipo de dolor se refería Jinwoo. Pero deseaba escuchar aquellas palabras que bajo ninguna otra circunstancia saldrían.


La reacción de Jinwoo de cubrir su rostro lleno de vergüenza fue tan hermosa. 


— Cariño…


En el momento que pronunció esas palabras, Han Seo se percató que el cuerpo de Jinwoo se había congelado. Sus manos se deslizaron hacia abajo dejando sus ojos libres como si quisiera confirmar que sus palabras fueron correctamente percibidas.


— ¿Qué,  qué?


— Estamos haciendo el amor, ¿por qué mi cariño me habla con tanta formalidad?


Los iris revoloteando frente a él eran hermosos, Han Seo no pudo soportarlo más y besó apasionadamente los labios de Jinwoo mientras sus manos acariciaban la piel de la espalda debajo de la tela.


— Umm…


La feromona sexual que era tan agresiva no dejaba de salir del cuerpo de Han Seo. Definitivamente había llegado su Rut. Sin embargo, era la primera vez que perdía el control de esa manera.


En el momento que su erección comenzó a palpitar, Han Seo se alejó del cuerpo más pequeño y comenzó a desnudarlo prenda por prenda rápidamente. El cuerpo de Jinwoo era brillante,  como si finos diamantes estuvieran brillando sobre su piel empapada de sudor. 


Han Seo trago saliva por su garganta y suavemente acarició las estilizadas piernas de Jinwoo.


— Ah…


La feromona Omega que se ponía más espesa conforme Han Seo estimulaba el cuerpo de Jinwoo, parecía incitar una explosión de feromona Alfa. Era como si estuviera loco por devorar el cuerpo de su cónyuge. 


Inclinándose sobre esas hermosas piernas, Han Seo esparció suaves besos por toda esa suave piel. Podía sentir los espasmos involuntarios de su oponente, pero eso solo lo instó a ser más provocativo.  Pronto, varias marcas de amor fueron dibujadas como un camino hasta su intimidad.


En el momento que tuvo la sensación de algo caliente rozando sus genitales, el cuerpo de Jinwoo brincó y rápidamente trató de empujar la cabeza de Han Seo hacia otro lugar.


Sin embargo, la sensación no se alejó y por el contrario se fue intensificando gradualmente. 


— Ah… Ah…


La piel de sus genitales fue barrida por algo húmedo y caliente que pasaba lentamente de arriba hacia abajo. 


Al estar siendo presionado por una feromona Alfa dominante, el cuerpo de Jinwoo se estremeció. Era imposible poder manejar una feromona tan agresiva siendo un recesivo. 


Pero en ese momento su mente se derritió como helado de mantequilla. 


La lengua que presionó el orificio de la uretra presionaba con fuerza como si estuviera cavando en ese lugar. Y la descarga eléctrica que estimuló todo su cuerpo fue tan intensa como ver fuegos artificiales dentro de su cerebro por primera vez.


Habían mezclado sus cuerpos algunas pocas veces, pero nunca había sentido nada como eso. Jinwoo pensó que debió haber sido por la feromona que lo estaba presionando constantemente, al grado de que le era difícil respirar. 


Mirando el cuerpo retorcerse con fuerza, Han Seo no se detuvo. Y permaneció estimulando con su lengua la erección de Jinwoo.


¿Puede alguien saber tan dulce? El pilar que se levantó tenía una forma alargada y lisa, no había venas a su alrededor y su grosor era apenas de la mitad del suyo. La piel lampiña que se mostraba ante sus ojos era de un color rosado similar al de una flor que florece en primavera. 


El lugar íntimo donde solo él puede llegar.


Ante ese pensamiento una incomodidad comenzó a ser más intensa en la entrepierna de Han Seo, quien sin cambiar de postura bajó la cremallera de sus pantalones y deslizó la ropa interior hacía abajo para que la bestia pudiera salir. 


Sus manos que parecían estar acariciando una estatua de fino mármol barrieron cada parte del cuerpo que temblaba estrepitosamente. Su mente estaba llena de una espesa neblina que le impedía pensar claramente sus acciones. Sin embargo, el placer que se desbordaba en su cuerpo con el simple hecho de tocar, besar, frotar su cuerpo contra el de su oponente era algo que estaba a punto de volverlo loco.

En ese momento Han Seo abrió su boca y se tragó el pilar que revoloteaba por completo. Mientras su lengua barría la carne caliente en el interior de su boca. Sintió como su cabello era sujetado y empujado débilmente hacía abajo.


Sus ojos miraron con sorpresa la imagen de un hermoso hombre encorvando su espalda con los ojos cerrados y siendo incapaz de soportar todo ese placer. Las acciones sobre su cabeza eran débiles y hasta ese momento divertidas. 


— ¡Ay…!


En el momento que los dedos de Han Seo barrieron los pliegues empapados en rebosante líquido amoroso, sintió como el cuerpo de Jinwoo se sacudía como una sardina fuera del agua. 


No había pasado tanto tiempo desde que comenzó, pero el agujero estaba completamente empapado. El líquido translúcido se estaba comenzando a deslizar por la palma de su mano y por su muñeca.


Una intensa sensación de sed comenzó a picar en su garganta. 


El cuerpo debajo de él fue girado sin previo aviso y mientras escuchaba los jadeos de Jinwoo, Han Seo lo colocó boca abajo, levantando sus glúteos y separando sus piernas para poder tener acceso al lugar más secreto del Omega. 


— Owww… ¿Está postura…? Ah… No… Espera… Hip.


Jinwoo que no podía pensar o decir algo, siguió temblando. 


Han Seo acercó su rostro al diminuto y pálido agujero. La punta de su nariz comenzó a barrer cada pliegue del agujero de Jinwoo lentamente. 


La feromona Omega que se estaba desbordando era más intensa en las zonas erógenas. Han Seo descubrió que en ese lugar del cuerpo de Jinwoo, la feromona era más intensa que en el resto de su cuerpo.


Sintió como su nariz se empapaba en ese líquido tibio y sin poder esperar más, sacó su lengua y acarició lentamente el borde del agujero.


— Ah… Sr. Han… Ah… Eso es… 


— ¿Por qué me llamas así?


Como si estuviera molesto por las palabras formales dentro de ese tipo de situación, Han Seo llevó la punta de su lengua y presionó la entrada con fuerza.


— ¿Cómo…? Ah… ¿Cómo…?


— ... Acabo de decírtelo, ¿lo has olvidado?


Han Seo se percató de cómo el cuerpo de Jinwoo se estremecía con más fuerza. 


Al mismo tiempo, la feromona Omega que era empalagosa y constantemente se pegaba a su cuerpo parecía revolotear con más fuerza.


— ¿Ca… Cariño…?


Fueron unas palabras inesperadas. Han Seo no pensó que Jinwoo fuera capaz de superar su timidez y expresar esas palabras tan lindas. 


— Si, cariño… Así es. 


— ¡Ah!


Sin poder contener sus impulsos, Han Seo sujetó el cuerpo de Jinwoo y nuevamente lo giró hacía arriba. Los labios que habían expresado esas dulces palabras, comenzaron a ser devorados con urgencia.


La saliva que se fue mezclando entre los dos cuerpos era espesa y dulce. Han Seo, que estaba a punto de volverse loco por el deseo codicioso que explotaba constantemente, perforó la intimidad de Jinwoo con sus dedos. 


— Ah… Espera… ¡Allí! Oh…


Jinwoo separó sus labios para hablar con urgencia, pero Han Seo nuevamente volvió a besarlo. 


La cálida sensación de la pared interior que estaba succionando sus dedos como si quisiera llevarlos hasta el fondo comenzó a provocar que su propia erección estuviera a punto de explotar. 


— Jinwoo…


— ¿Si…?


Mientras los dedos que cavaban en el interior se movían simulando la acción de una tijera. Han Seo miró fijamente los ojos llenos de tonalidades verdes, azules y doradas. El brillo intenso que se reflejaba desde esas iris llenas de color hacía que su corazón se acelerara sin poder evitarlo. 


— ¿Te gusto…? ¿Jinwoo…? ¿Yo te gusto?


La pupila negra se contrajo en cámara lenta por unos instantes y después comenzó a dilatarse. El rostro debajo de él comenzó a ponerse tan rojo como un tomate. Por unos instantes Jinwoo quiso huir, pero Han Seo no se lo permitió.


Mirándose fijamente por unos momentos, Han Seo escupió las palabras que estaba conteniendo. 


— A mí me gusta mucho Jinwoo. 


La expresión llena de luz en el rostro de Jinwoo dejó perplejo a Han Seo. Las manos temblorosas que estaban presionando su pecho hacía atrás se detuvieron y aquellos delgados brazos comenzaron a envolver su cuello. 


Jinwoo jaló su cuerpo un poco apoyándose del cuello firme de Han Seo y enterró su nariz allí.


— ¡Claro que sí! ¡Amo a mi esposo…! Ah…


En el momento que esas palabras se filtraron por sus oídos, su cuerpo se movió por sí mismo, como si ya no pudiera ser capaz de controlarse. 


— ¡Ah…!


Su miembro comenzó a presionar la punta del orificio de Jinwoo. La sensación de ser succionado por una pared caliente y suave le hizo perder la cabeza en ese momento. Sujetando la cintura de Jinwoo con fuerza, Han Seo se incrustó en su interior de un solo movimiento. 


— ¡Ahhh!


Jinwoo gritó.


Al mismo tiempo que gritaba, su pared se contrajo más y más. Era una sensación abrumadora. Su erección trataba de llegar a lo más profundo de su interior. 


— ¡No!


En el momento que la penetración fue hasta cierto punto profunda, el pene de Han Seo golpeó contra un montículo hinchado.


— Ah…


La reacción del cuerpo debajo de él fue violenta y mientras Jinwoo se sacudía violentamente, un chorro de semen salía expulsado de su pene.


Aún así Han Seo no se detuvo y siguió pinchando la próstata con fuerza.


— ¡Ah! ¡Wow!...


La mente de Jinwoo se había derretido ante los fuegos artificiales que constantemente explotaban en su mente. Se aferraba al cuello de Han Seo desesperadamente y cada vez que el pene se enterraba hasta lo más profundo, Han Seo lo besaba con ferocidad.


Era como estar debajo de una bestia sedienta y hambrienta que se encontraba saciando su feroz apetito.


— ¡Wow!


— No sueltes tus brazos 


— Uh… ¡Ahhhhhh!


Su cuerpo fue llevado hacia adelante. Cuando Han Seo cambió su postura y levantó el cuerpo que era tan ligero como un cojín. 


Las piernas de Jinwoo quedaron enroscadas a su cintura y los glúteos regordetes descansaban sobre las piernas de Han Seo.


— ¡No!... ¡Cielos! Ah…


El cuerpo de Jinwoo se elevó y bajó con fuerza una y otra vez. La erección que se abría pasó con determinación llegó a un lugar donde antes no.


'¿Qué es esta sensación?'


Lo que antes entró hasta lo más profundo de ese pequeño cuerpo, fue obstruido por una membrana caliente y resbaladiza que daba la sensación de estar cerrando el paso.


— ¡Ay!... ¡Me duele!


Jinwoo se aferró a su pecho llorando inconsolablemente ante un dolor inesperado.


Eso no había pasado antes. Sin embargo, cuando presionaba allí las paredes internas que lo abrazaban se volvían más estrechas. Sin poder ser consciente de sus propias acciones, Han Seo cavó dentro del agujero con fuerza, golpeando la cavidad que no le permitía llegar a ese precioso lugar.


— ¡No…! ¡Ah…!


Jinwoo que estaba abrazando fuertemente a Han Seo pegó su pecho contra el de su cónyuge Alfa y su cuello quedó expuesto. 


La piel aterciopelada empapada de sudor resplandecía como hermosas perlas. 


Han Seo enterró su nariz en el cuello de Jinwoo inhalando su feromona espesa. 


— ¡¿Cariño!? Se… Se está hinchado… ¡Ah!


La sensación del pene comenzando a abultarse fue aterradora. No era un tamaño normal, en condiciones normales… Pero ¿Crecer sin poderlo controlar? Jinwoo se quejó lastimeramente por la sensación incómoda. Sin embargo, Han Seo no estaba satisfecho. Sus manos inmovilizaron la cintura de Jinwoo y con un brusco movimiento, el pene se incrustó en la cavidad del útero que no había sido estimulado nunca.


— Ay… ¡Me duele! ¡Me duele mucho!... Esposo.


Sin dejar de aferrarse a él, Jinwoo sollozó y dejó que sus lágrimas empapen el hombro de Han Seo.  Una lluvia de besos cálidos fue depositada en la piel blanca de Jinwoo.


La sensación que cruzó violentamente por todo su cuerpo y estalló en su cerebro fue tan vivida que Han Seo no pudo esperar por mucho tiempo. Era una sensación similar a cuando contienes el aliento debajo del agua por mucho tiempo y se vuelve imposible retener el impulso para respirar.


En ese momento, su cuerpo estaba a punto de expulsar algo que estaba siendo reprimido con fuerza.


El sonido lascivo que inundaba la habitación se hizo más fuerte y el chapoteo húmedo se agudizó por la cantidad de líquido amoroso que se desbordaba del interior de Jinwoo. 


Había escuchado de eso antes, pero era la primera vez que ambos lo experimentaban. 


Cuando un Omega dominante no está en celo, es muy difícil que el útero pueda abrirse para recibir la semilla de un Alfa. 


Sin embargo, la feromona de un Alfa dominante durante un Rut es más que suficiente como para lograr no solo que se abriera, sino de mantener un nudo durante ese cambio temporal en el cuerpo del Omega.


El dolor que antes era insoportable comenzó a alejarse y la sensación vertiginosa que provocó que su cabeza diera vueltas y vueltas se fue intensificando. Jinwoo perdió la cuenta de las veces que había eyaculado con el placer que sentía en su agujero. 


Mientras la pared se contraía y succionaba su erección, la sensación de una cálida piel llenó su boca. Era un sabor que podía describirse como algo empalagoso, estrepitoso, y aromático.  


— ¡Ohhhh! ¡Me siento enfermo!




Han Seo, sintiendo el cuerpo convulsionando de Jinwoo se mantuvo en lo más profundo de su cavidad hasta que el nudo terminó y todo el semen comenzó a desbordarse en el interior de la persona que yacía desvanecida entre sus brazos.


Sin poder evitarlo, Han Seo no pudo evitar seguir perforando ese interior por mucho, mucho tiempo. 


Jinwoo recuperó y perdió la conciencia muchas veces. Su piel fue masticada y devorada hasta el punto que todo su cuerpo se llenó de flores de color rojizo. 


Su voz se había ido, ni siquiera podía abrir sus ojos de lo cansado que estaba. 


Su cuerpo no pudo soportar toda la feromona que se estaba impregnado. Sin embargo era algo agradable. Al igual que Han Seo, toda su feromona fue liberada como si una granada hubiera explotado dentro de la habitación. Nunca antes había tenido una sensación así pero después de sentirse ligero, su conciencia se desvaneció. 


Han Seo no dejó de poseerlo con frenesí, fue como si estuviera compensando las noches de arduo trabajo en la compañía lejos de esa persona. En ese momento, todo se nubló y lo único que estaba ocupando toda su mente era la sensación de unión entre él y Jinwoo. 


***


Esos recuerdos... Los había olvidado... Han Seo lamentó haberlos olvidado y en el momento que no vio a Jinwoo a su lado a la mañana siguiente, pensó que todo había sido un sueño dado que los fragmentos estaban distorsionados y mezclados... Jinwoo jamás le dijo algo y después tuvo que salir inesperadamente por un viaje a una sucursal en el extranjero sin haberse dado el tiempo de aclarar el tema.


En ese momento, antes de volver. El secretario Sujin le mostró una tableta llena de procedimientos irregulares que habían pasado por la verificación de Kim Juwon, el hermano mayor de Jinwoo y quien se había sumado como director en la empresa después del compromiso. 


Había decenas de proyectos con una validación sin haber cumplido los requisitos de calidad mínimos. Era un fraude.


En ese momento, la mente de Han Seo se nubló y la ira lo consumió. 


Todo el cariño que estaba contenido en espera de llegar y desbordarse sobre su cónyuge se evaporó en un instante y comenzaron el juicio en contra de la familia Kim. Cuando regresó a la empresa no había rastro de de Kim Juwon, y después se enteró que el presidente Kim había dejado el país. 

El grupo Kim deslindó responsabilidad de las acciones personales del anterior presidente y otra persona tomó el cargo como nuevo presidente. 


Eso no se iba a quedar así, después de dos meses de arduo trabajo en tribunales, el grupo Kim colapsó, pero las finanzas del Grupo Han se vieron severamente comprometidas por las quejas y demandas por proyectos de mala calidad, las pérdidas fueron considerables... Eran más de miles de millones de dólares en compensaciones por malas prácticas. La empresa no podría recuperarse tan fácilmente. 


Tras una asesoría legal, el divorcio por parte del Alfa llevaba como consecuencia la compensación al cónyuge Omega por varios millones de dólares, Han Seo no pensaba en darle un won más a esa familia. 


Su padre enfermó severamente, y Han Seo terminó desquitándose con la persona que había servido como costal de golpes por todos durante toda su vida.


— Kim Jinwoo. 


La oscura y silenciosa noche se había vuelto pesada para Han Seo después de una larga charla con su equipo legal en la empresa. Al llegar a casa, llevaba consigo un resultado que se le había estado ocultando durante más de un año. Kim Jinwoo, su esposo, era un Omega recesivo. 

Se sintió engañado y usó ese pedazo de papel como un arma para amenazar a Jinwoo y hacerlo firmar la solicitud de divorcio inicialmente. 


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